lunes, 19 de diciembre de 2022

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (800) 13/12/2022.

Por: Camilo Crespo. 

El video en directo se puede ver en el Canal deYouTube de Libertad8 :

O directamente: https://www.youtube.com/watch?v=6cof6gzlmJ8

“Oremos”. Buenas tardes. Andrés da la bienvenida a la edición 800, lo que provoca el aplauso de los asistentes. Saluda a los onlainers y pide se comparta el enlace en redes. Repasa las normas y el sorteo, parte divertida que no se transmite. También menciona a Camilo (yo mismo) y a Ernesto con sus funciones especiales del micro. Menciona que aparte de Andrés, Fran Fernández es el único de los presentes que estuvo en la sesión número 1 del micro. Así que Andrés le pide que inaugure el micro. Fran, cómo no, se brinda sin problemas.

 

Fran Fernández es en realidad el único de los presentes (incluido Andrés, porque éste solo presentaba) que cantó en la primera sesión del MAL8. Primero canta un poquito de Agua de Limón en homenaje a Andrés. Ya después ataca uno de sus temas, “Siempre quiero verte”, que dedica a todos aquellos que sólo a través de la música han podido expresarse libremente. “Aunque nunca te lo diga y suela detener mis manos para no escribirte tanto como quiero. Aunque tú creas que pasas por mis sueños de visita y que solo soy tu amante pasajero…”. Grande Fran Fernández.

 

Antonio Espinosa nos canta su canción que hizo para el taller "Ahora", en la que habla de las cosas que se iban perdiendo en el confinamiento debido a la situación. “…Ahora que somos como hermanos, y nos brota la solidaridad, por qué no empezamos a mostrarnos con mas respeto y nos dejamos de incordiar…”. Muy certera en su repaso de todo aquello.

 

Esperanza Anson dice que, aunque no pudo asistir al concierto “Calles de Madrid”, nos trae su poesía de  "La plaza Menéndez Pelayo" pues quería de algún modo formar parte de ello. “Una mañana de Julio te pisé por primera vez, con mi largo pelo oscuro y mis sueños de niñez. La plaza que parece un espejo pues los edificios que la encuadran son hermanos gemelos…”. Otro retazo de Madrid para anotar de cara al posible recorrido de lugares.

 

Alfonso Collantes saluda, enchufa la guitarra, prueba el sonido, afina un poco una cuerda y comienza con su púa a mostrarnos los primeros compases del ritmo que llevará su canción. “Enciendo la mecha. Está detrás de ti. No puedes ver quién. Si tú no lo pruebas, decidiré por ti lo que hacer. Me paro a llorar. No pasa nada. Y vuelta a empezar. No pasa nada…”. Esas muestras musicales que algunos solo nos atrevemos a hacer en privado, Alfonso las plasma sobre el escenario. Al final no ha quemado la guitarra pero la púa volando es todo un símbolo. Bravo.

 

Andrés anuncia que en la siguiente tanda habrá cinco personas. Y es que el primero soy yo, Camilo Crespo, este cronista. Como hay un retraso en la transmisión de treinta segundos, cuando me quiero dar cuenta recibo la video conferencia y me encuentro mirando a un pedazo de foco, de modo que revivo la sensación plena de estar en el escenario, es decir, no veo nada. Pero como ya estaba avisado, doy fe de algunos datos sobre los micros y comento lo que les echo en falta, sin caer en sensiblerías. Me llevo mi correspondiente aplauso. Y por si alguien se lo pregunta, no he cantado nada porque ya sabíamos que el sonido del teléfono no daba calidad suficiente.

 

Alberto Beni vuelve a meterse por los caminos del flamenco. Tras un pequeño preludio comienza a recitar, acompañándose de la guitarra. “Calle, somos calle. Fuimos sombra. Fuimos nombre. Fuimos, somos y seremos verso, besos, caricias. Dejamos sin agujas los relojes, Radicales, somos rocas, Intifada. Somos lucha, grito. Somos libres, somos cumbres…”. Muy bueno. Gracias, Alberto.

 

Mi Antonio deja una “Niña del columpio” y “Puerta floreada” para el sorteo. Me dedica la canción, porque ayer me mostré un poco pelusón. Pero no sé si me alegro de la dedicatoria, dado el transcurso de la canción… Comienza ya fuerte la cosa. “Morí y fue raro. Pero aprendí  que la muerte deja inerte a lo que queda de ti. A pesar de lo extraño, morir por sorpresa, y a mi edad, no me hizo daño. Las exequias también raras, metido en aquella caja. Y las flores ya marchitas y el rodar de cuatro lágrimas…”. Aunque sí, al final me congratulé, porque como yo soy gato...

 

Andrés Sudón pasa directamente a cantarnos su tema del taller "Paz". Una preciosidad, sin explicar que el miércoles 21 hará concierto aniversario en Libertad 8, solo, sin bajo ni batería. Intimo, o sea muy bonito. “…Mido a mediodía mi maldad con reglas que tenemos todos los demás. Yo es un lugar donde no hay paz en tu no saben terminar la guerra. Ahora él me lanza a la violencia y m echo una siesta. Quién volviera a donde no hay certezas. Yo es un lugar donde no hay paz…”. Este tema es de esos en que Andrés mira al mundo desde dentro y saca conclusiones.

 

Daniel Romero deja para el sorteo, como de costumbre, uno de sus poemas secretos y esta vez ceñido con una cinta del color paradigmático de la tinta. Y para corporeizar el primer poema, explica, que cada dos años hay ocasión de recitar, esta pulsera cuyo adorno principal es un poliedro esferoide semejante a un balón. Y recita "Retóricas", acerca del papel de la selección española en el mundial, aclarando que el título no es un sustantivo en plural, sino el adjetivo de las preguntas que plantea. El segundo poema se titula “Parterre” y trata, claro, de flores. Y por último recita “Colapso”. Otro, incide, que hay ocasión de recitar cada cierto —nunca mejor dicho— tiempo. Va sobre los desmanes que provoca la lluvia. Los tres poemas se pueden leer en el siguiente enlace: 

https://danielromeropoeta.blogspot.com/2022/12/retoricas-parterre-colapso.html

 

Y Andrés anuncia la última tanda, que consta de tres personas, y si da tiempo saldrán las dos que quedan de la lista de espera.

 

Alejandro Rosa trae hoy guitarra 12 cuerdas. Lo resalto porque es un instrumento que me gusta tocar siempre que puedo pillarlo. Viene feliz pues, después de muchos meses, ayer tuvo la primera escucha de su disco. Iba a añadir algo pero se lo calla pues prefiere dejarlo para después como sorpresa. Así que canta "Estoy bien", canción que nació en un taller del MAL8. “Amanezco bien. Te tengo al lado. Y la casa huele a café. Juntos vamos a arrancar el día. Te conozco bien. O eso intento. Cuando estás que no estás, solo tengo que esperar y observarte de cerca. Procurar que no te me pierdas. Estoy bien...”. 

 

María Reigns tiene que ver con la sorpresa de Alejandro. Y es que la va a acompañar a hacer una versión un poco improvisada de “Love of my life”, del grupo Queen y que parece ser tocaron una vez en una boda, o así lo he querido entender yo. Por supuesto, es una interpretación preciosa, pues su voz tiene esos matices que ayer comenté.

 

Luis Blanco sale algo apabullado por la interpretación de María y con una sonrisa añade que el micrófono no lo piensa tocar (es que lleva el micro toda la tarde que está de mírame y no me toques; y nunca mejor dicho). Luis dice que trae un poema que también es un momento de esos que de vez en cuando le regala su oficio de educador social, aunque a él le gusta más el término de educador de calle. “A ti, que te dices por dentro vacía. Que a diario te recorres Madrid, andando para ir al trabajo. Evitas el metro por buenas razones. Aun te asusta el día en que pensaste acabar con todo, dejándote caer al paso de un tren…”. Hermoso retrato de la lucha de personas a las que la vida no les ha dado de momento la oportunidad de ser felices.

 

Álvaro Basanta nos canta “A flor de piel”, una canción que habla de esa extraña sensación de cuando vuelves a un sitio al cabo de mucho tiempo, esperando encontrar aquello que habías dejado y te das cuenta de que todo es ya muy diferente. “Vuelvo en una mañana de verano. Los caminantes mudos colman el barrio. Miro hacia todos lados buscando algo. Cuatro niños juegan a no pisar el barro. Quisiera tenerte conmigo, aquí a mi lado, y preguntarle a cielo sobre ti…”. Muy agradable sonido en este melancólico tema acompañado por un silbido perfecto.

 

Irune es una #nuevaparticipante. Acompañada a la guitarra por su compañero Leo, canta "Solo una noche", su primera composición. Dice que en la pandemia le hizo clic el cerebro y se metió en serio a cantar. Bendito clic. “Mis ojos se encienden cuando te miro. Mi cuerpo te llama. Necesita tu cariño. Es posible me  notes enamorada. Quiero dibujar mi nombre por tu espalda. Sólo una noche para encontrarnos. Como locos de amor, emborracharnos”. Buena fuerza transmite su voz.

 

Esto se termina. Ernesto Arango hace un resumen muy bien dramatizado de las palabras que ha ido cazando durante la sesión. Después Andrés repasa la lista de actuantes, despide a los onlainers, cierra la conexión y, tras el ignoto sorteo, despide el micro hasta la semana que viene.

"Podéis ir en paz".

No hay comentarios:

Publicar un comentario