miércoles, 1 de abril de 2020

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (556). 31/03/2020


Por: Camilo Crespo.

(Los videos de este micro se pueden ver en el muro del grupo Micro Abierto Libertad Ocho, de Facebook)

”Oremos”.  El hecho de hacer el micro por internet tiene muchos beneficios. E inconvenientes. Uno de esos inconvenientes es el hecho del retardo en las emisiones. Tú pones algo y hasta 10 segundos después no lo ve el receptor.  Y más problemas. Hoy se ha hecho patente. Sobre todo lo ha sufrido Ernesto Arango. Se ha pasado medio micro buscando las emisiones. Y yo también. He observado que por la aplicación del móvil llega antes que por el ordenador. De hecho, en el ordenador no me avisa de cuando Andrés está emitiendo. Quizá escosa de perfiles. Problemas de la tecnología Facebook. “La quiero tanto…”. En fin. Por cierto. Gracias, Ernesto, por enviarme tu resumen del micro. Un abrazo.


Buenas tardes.  A eso de las seis de la tarde comienza la edición 556 de este micro abierto online (internacional, según nos recuerda Ernesto). Andrés, elegante e institucional, nos saluda e indica varias cosas: una, que manda un recuerdo para la gente del Libertad. A ver si volvemos pronto… Dos, que Valentín no se conecta y estaría bien que lo hiciera. Tres, que hoy se anunciará el nuevo taller. Y presenta a la primera tanda.


Ernesto entra gracias a que le avisan Una y Marco por chat. Hoy el Facebook está fatal. Y tras relatar sus problemas informáticos, comienza un popurrí de canciones y letras. “Micro, micro, micro, dadme más micro por favor… feliz, feliz, feliz… vivo en la carretera, aparcado en un blues… vivir, vivir es ser feliz…”. No cabe duda de que este micro ha empezado potente.


El siguiente en aparecer es Perdido entre ilusiones. Su tema se llama “Setecientos ochenta y nueve”. Con buen ritmo en la guitarra y punteando las sílabas como si las teclease en una máquina de escribir, canta “…cada quien es responsable de sus hechos… mientras quemaba con las ansias de viajar al mundo de sus sueños, donde no se ve la luna tranquila, no tengas dudas; aquí reina la locura…”.  Al final manda saludos y ánimo para seguir “¡resistiendo a tope!”.


Desde el perfil de su “manager”, aparece Txo Braceras, cantautor de Bilbao. No dice el nombre de su tema, aunque creo que debe de ser “Volar”. Habla de una despedida y del alejamiento posterior. “Lloran los pensamientos de no estar a tu lado… fui con las historia que me fueron contando: tu no quisiste volver hacia atrás…” Nos canta otra, llamada “Soñar” Se la dedica a un cantautor amigo de Almería. “Suelo romper fronteras con las manos, que sea todo por igual, quebrar asfalto, que crezcan las flores y empiecen a bailar… Y soñar…  soñar…”. Bello tema. Nunca dejemos de soñar con cosas posibles.


Ahora es el turno del gran Marco Vacío, rompedor de zonas de confort. Nos enseña la guitarra que encontró en un desván hace mucho tiempo y nos canta su canción “Bunker solar”, que ve ahora más entendible. Canción en la que se mezcla una melodía de belleza rara con una guitarra algo lisérgica, inquietante. “…afuera el miedo y la esperanza luchan entre ellos por entrar… Porque afuera están lloviendo nazis… En el bunker solar solamente espero hasta el final del diluvio… ”. Una letra muy buena. Si no la conociera de antes, diría que está hecha por este confinamiento.

Andrés vuelve  a aparecer. Mientras espera a que nos conectemos, nos enseña sus chichas. Nos recuerda que después anunciará el primer taller online. No sabe si será un día de micro u otro. Y convoca a los siguientes participantes.


La primera de esta tanda es Victoria Loarte. La vemos sentada con su guitarra  tomando un café “en libertad”, con el ruido del perro bebiendo de fondo. Antes re empezar se pregunta qué es la libertad. Y se contesta que quizá sea esto: cantar en libertad. Jura que lo hará o procurará hacerlo. Nos canta su canción “Estoy viva”. Con aires un poco años noventa, hace un tema muy pegadizo. “Me vuelvo y me revuelvo si alguien me sujeta… con tantas ganas de más, el silencio vuelve a susurrar que estoy viva…”. Y nos despide con un “Vamos; que el ritmo no pare” Yo quiero lo que está tomando esta chica. Ja ja.


Y después de esa energía, viene la sensatez y ese profundo interior de Andrés Sudón. Nos cuenta que, al igual que Marco Vacío, ha estado rebuscando entre sus canciones una que venga a cuento de esta situación. Nos canta su tema del taller “Gente”. También es una canción muy especial. Ya conocemos a Andrés. Todo lo que toca lo transforma. “Presiento en el desierto de mi alma una multitud en llamas… Trabajo todo esta soledad porque la gente es mi dragón”.


Javier Gijón nos cuenta que musicó un poema de Mercedes Lázaro llamado “Sin ti”, del libro de poemas “Ayer encontré sueños olvidados”. Y Javier que ahora que nos falta gente a nuestro alrededor viene muy a cuento. La dedica a los que no están de momento y a los que no volverán. “Sin ti pierdo el color, el brillo de tus ojos. Sólo siete segundos y me parecen los siete años tras un cristal roto”. Se despide Tras mandar saludos a Mercedes Lázaro y María Guivernau, otra poeta, que está viéndolo.


Llega el turno de China Clara. Esta poeta, que nos lee unos cuantos poemas. El primero se llama “Oxido”, de su nuevo libro, llamado “Todavía”. “Los engranajes se oxidan al día… tengo tanto con qué cargar, que mi poesía no se hace liviana”.  El siguiente “Articulista de la palabra”. “Leerte el alcohol en sangre, la metamorfosis de tu adolescencia tardía… Acostados en la calle, con viejas indignadas…”. Después no lee “Lunes”. “Porque lunes es un estado de ánimo…”. Ya rebasado el tiempo nos lee otro, llamado “Fotoperiodo”, que habla del estado tras una ruptura.

Andrés comparece para dar las gracias a los que han participado en esta ronda y anuncia el siguiente taller. Lo presenta indicando que las cancones nos han transformado y siempre hacemos las canciones porque creemos que van a servir para algo y para alguien. Este momento es especial, porque el mundo va a cambiar. No cabe duda. Una crisis puede ser un problema o una solución. El mundo va a cambiar y seguro que hay gente trabajando para que el mundo sea feo. Nosotros debemos trabajar para que sea bonito. Debemos hacerlo con las canciones y con nuestro día a día. “Dentro de dos semanas”, nos dice -se para a encender un cigarro-, “haremos una canción llamada <Ahora>”. Mañana o pasado se publicará el evento con las características... Y pasa a la siguiente tanda.


La primera de esta segunda tanda es Una, que aparece en plan siamesa. Hace un chiste malo con “Ahora” y  “Ahorra”. Lo del siamesa es que lo ha visto en un disco de Björk. La canción que cantará va de que tras este encierro, seguro que sale algo positivo. Es la que da título a su disco “Hueco de ausencias”. Una bella canción. “Para aplacar esta ira de enfados tendrás que cantar, pasar a la acción, dejar que se aburra la desilusión… Mas se que estas penas también pasarán…” Me recuerda a aquellas canciones folk americanas sobre chicas que esperan un día ser libres. Muy bella.


Marta Plumilla nos invita a escuchar su disco “Álbum”, que está en todas las plataformas. Este tema se llama se llama “Salón de baile”. “Si quieres te puedes ir; yo me quedo un baile más. Se llevaron el alpiste pero nos dejaron a los pájaros. Nuestros bailes son tan tristes, que también los precintaron”. Esta canción me parece algo melancólica. Me hace pensar en un salón de baile, todo lleno de espejos, en plan palacio de Versalles. Todo muy francés.


El siguiente es Camilo Crespo (yo). La canción que va a cantar, también va al pelo. Menciona que cada cien años hay cuatro generaciones, así tras una guerra, tras cuatro generaciones se pierde el recuerdo del sufrimiento de la primera y se vuelve a liar. También comenta que el jueves hará un directo de media hora a las siete y media. La canción es de julio del año pasado y se llama “Hay que aprender”. En el típico estilo de Camilo, de ritmo abierto, algo folky. “Es el ciclo inevitable para hacer que la vida siga expandiéndose. Desastre, dolor, esfuerzo y comodidad. Es la respiración de la humanidad “. Entre explicaciones y canción se pasa un poco de tiempo. Hablaremos con él.


Y cambiamos de tercio. Ahora le toca a Suso Sudón.  Nos lee tres poemas. “No están escritos en cuarentena, pero podrían”. El primero se llama “Detrás”. “…Entre la pared y la mesilla debe de haber una foto de nosotros en un campo abierto. Obviado entre tantos pronombres posesivos está el amor, pastando flores frescas…”. El siguiente se titula “Mucha gente triste”. “Hay mucha gente triste viendo la tele por la tarde en España… millones de pobres sin luz… millones de bicicletas estáticas… mucha gente triste que pedaleando podría alumbrar a millones… “. El último poema sí está escrito durante la cuarentena y se llama “Dame”. “…Dame palabras de cimiento, Me alimento del cadáver de la pena… Dame velos de seda para el destello negro que me sale del centro…”. Bello.

Andrés realiza la presentación de  la última tanda. Comenta que hemos echado en falta a Valentín Nueda. Habrá que tener en cuenta que van a venir los aplausos. Porque desde que estamos en cuarentena, se ha establecido la costumbre de que todo el mundo aplauda por las ventanas como forma de agradecimiento a las personas de la sanidad (y también a todos aquellos que están trabajando para que esto se arregle, como transportist@s, limpiador@s, polici@s o la gente de las tiendas de comida, droguerías, farmacias, supermercados, etc.). Así que interrumpiremos la tanda a las ocho y continuaremos después. También nos comenta Andrés, que la canción de “Ahora”, hemos de hacerla tras haber paseado por dentro de nosotros y habernos preguntado realmente qué queremos que pase tras la cuarentena.


Así empieza Andrés Garrasparri, que antes de comenzar, repasa a la gente que escuchó ayer en el micro y a la que está hoy. Su canción se llama “Viaje a la luna”. “Dónde estuviste ayer, que traes las botas tan sucias; no me hagas mucho caso pero creo que en la luna. Estuve con Eva en el Paraíso; estuve con ella a orillas del río…”.


Hacemos la pausa de los aplausos y después entra Norte. Hoy va a hacer una versión de un tema que cantaba Elvis Presley. Sí, ese, el “rey del rock”. (Aunque para muchos el verdadero rey fue Chuck Berry). El tema se llama “Love me tender” y es una balada country, que realiza con su forma tan especial de entonar. Al final nos la dedica para estos momentos y para que amemos a la persona con la que estemos. Gracias, Sebastian.


Y por fin, el último en aparecer, tras un minuto de video en vacío, es Antonio Espinosa. Antonio nos canta ¡con guitarra desafinada! ¡Pero Antonio! (Daña a los oídos y no se tarda nada en afinar). Perdonemos por esta vez ese error de producción y escuchemos la letra. “Mantente siempre despierto, con las maletas hechas; por si cambian la tornas, no tener que volver a hacerlas… Así es la vida, con sus noches y sus días… con sus llantos y sus risas”.  También hay que recordar que mientras se transmite es preferible apagar las notificaciones.

Y llega la despedida. Andrés dice que echa de menos el “Estáis todos despedidos”, de Valentín, en las noches, tras el micro abierto en Libertad8. Nos recuerda el taller y cierra el micro numero 556. Después viene el sorteo. Sale el 148. Yo tenía el 133. ¡Algún día!

“Podéis ir en paz”.


4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. De nada, quien quiera que seas, ja ja

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    2. ¡Muchas gracias a TOD@S, especialmente a Andrés Sudón por organizarlo y a Camilo Crespo por redactar esta estupenda crónica! Por mi parte encantado de participar y conocer virtualmente vuestra creatividad.

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    3. Gracias a ti, por darnos motivos para seguir.

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