Por: Camilo Crespo.
(Los videos de este micro se pueden ver en el
muro del grupo Micro Abierto Libertad Ocho, de Facebook)
”Oremos”. Buenas tardes. No sé si os
habréis dado cuenta, pero desde que #estamosencasa,
la naturaleza está algo desatada. Llueve un día, al siguiente hace sol, al otro
viento… y así estamos, día sí y día también. Mientras fuera las noticias parece que
mejoran levemente, aquí, en el micro, andamos escasos de artistas. Esperemos
que la semana que viene con el taller, la gente se anime más, ya que ha
apuntados unos dieciséis. Esperemos que no se quede su participación sólo en el
taller. Andrés nos empuja a compartir sus vídeos de presentación para motivar a
la gente. Y poner quizá, pienso, el último de la sesión en Instagram…
Seguiremos ahí. Ante todo, gracias a todos los que participáis, por el apoyo a
este proyecto, que también ya es algo personal.
Son las seis y cinco cuando Andrés aparece en el
primer directo de la tarde. Pero la ha hecho en la página, en vez de hacerlo en
el grupo de Micro Abierto Libertad Ocho. Dice una frase eterna “Ahora es la
semana que viene”. (Por lo del taller). Comenta que es bueno hacer el micro
online, porque así si llueve podemos recoger la ropa enseguida. El problema es
que no podemos tocarnos, vernos físicamente. Además, lo del encierro se va
haciendo un poco pesado. Pero por otro lado, estamos aprendiendo a manejar la técnica
del online, que en realidad no es tan difícil. Parece que hay un problema.
Goiko escribe el comentario: “Goiko hoy no está, ¡¡¡le he pirateado
El primero es, claro, Ernesto. Le hemos pillado
algo a contramano, porque pensaba que el taller Ahora era hoy. De ahí la frase
antedicha de Andrés. Así rápidamente saca de su cerebro mágico un tema:
“Gilipollas”. Lo define como la persona que hace lo que le mandan en beneficio
de otras personas que lo usan. Y se autodefine como tal, haciendo hincapié en
que “cumple con nota” lo de hacer ascender a sus contratadotes/as, que son
también bastante engañadores/as. Otra de las características del gilipollas es
su necesidad, tanto monetaria como afectiva, por lo que alrededor del
gilipollas hay una aureola de aprovechados y oportunistas. “¡Dejemos de ser
gilipollas!” Cambiemos la gilipollez por bondad, que no es lo mismo… “Seamos
los que hacemos”. Genial. Hoy Ernesto ha estado espléndido. Y así se lo hemos
reconocido todos.
La siguiente es Una. Esta mujer siempre añade algo a presentación. Hoy es una
pila de gorros sobre la cabeza. Le da un aspecto muy original. Interesante. No
pierde mucho el tiempo en presentaciones. Su canción habla de “gramática envejecimiento”. Se llama “Todavía” es la canción que abre su precioso disco
“Hueco de Ausencias”. También es el
single. “Todavía me desea, todavía me sonríe,
me atormenta la pregunta de hasta cuándo todavía…. Todavía es un rasero,
pronunciado con desprecio, todavía es una ofensa disfrazada de requiebro”. La
verdad es que esta canción me produce tristeza. Busquemos esperanzas. Y para
acabar nos recomienda el vídeo que nos adjunta en un enlace (https://youtu.be/mof-OFP6DXE), y que es realmente bello, mientras va deshaciéndose de los sombreros, uno a uno. Muy efectista. ¡Bravo!
Cambiamos de palo. Ahora hace su directo un
poeta: Suso Sánchez Sudón. Directamente nos va a recitar un poema que es una
apología del baile. “Mira cómo vive el movimiento indescriptible de un cuerpo a
la deriva de las corrientes cósmicas…”. Es una poesía preciosa, que todo aquel
que ama el baile, entiende perfectamente. El siguiente se llama “Usted”. “… ¿Usted
me puede decir si le ama quien no le ve? ¿Usted me puede decir si le ama Vd.
sin ver a su vez y al tiempo no ven que no se aman entre Vds., las veces que se
pertenecen?” Menudo trabalenguas que mete la duda en la ecuación de la
relación. Antes de abordar la última poesía, Suso hace una declaración de
principios. Está en contra de todo tipo de censura. Así que cree que “lo que
hay que hacer con la gente que dice cosas que no son, es simplemente no darles
ni bola… no servir de trampolín de sus palabras”. Me recuerda a la idea
anarquista, según la cual, a la gente que no trabaja por la comunidad no hay
que castigarles, ni obligarles, sino pasar de ellos. Así se darán cuenta de que
ha que colaborar… “No opongan resistencia a los muros, no combatan el dolor,
deshagan el juicio… abran las presas del mal… deshagan las puertas de las casas
para reír surfeando en la riada”.
Ahora
aparece Javier Gijón, que “me” dedica unos minutos musicales. El origen de los
“momentos musicales” está en los tiempos heroicos de la primera Televisión
Española, cuando era la única. De vez en cuando se les iba la emisión, o
alguien llamaba para que pararan un programa “poco conveniente” entonces aparecía una locutora muy amable que
te decía que por causas técnicas y tal, nos ofrecían unos minutos musicales. Y
te ponían la famosa carta de ajuste (aún en blanco y negro) y música de Franck
Pourcel. Y así pasaban los cinco o más minutos de rigor…. Je je. Perdona,
Javier. Sigo contigo. Javier explica que su canción va dedicada a toda esa
gente invisible en las ciudades. Esa gente que ha venido en patera y que con
nuestras prisas no vemos. Y que ahora lo pasan peor aún que el resto, ya que
viven de limosnas que ahora no hay. “Ilusiones robadas” habla de un encuentro
con una de esas personas, del sentimiento de culta que nos genera y de los
momentos que dedicamos a pensar en sus cómo cuándo y porqué. “Nadie le
veía a nadie importaba; él sólo vivía y
él sólo callaba”.
Andrés pide disculpas porque ha emitido el
primer directo en el muro de la página de Micro Abierto Libertad Ocho en vez de
en el grupo. Le he comentado lo de la barba y dice lo bien que se siente con
menos barbas. Repasa el taller, que supone todos estamos componiendo como
locos. Menciona también al Libertad8. Echamos mucho de menos el local y los
conciertos, a Julián, a Jesús… Pero cuando nos encontremos de nuevo ¡no
podremos besarnos y tal! Quizá inventen un preservativo facial, para poder
besarse, aunque “seguirá siendo pecado si no estáis casados”…
Siguiente tanda, que
comienza con Camilo Crespo (moi). La barba va creciendo. Camilo dedica unos
momentos musicales a Javier… Camilo comenta que esta semana se está haciendo un
homenaje a Aute por las redes. Y él le ha hecho una también. Y es la que va a
cantar. Mezcla lo trágico con algo de humor. “No pudo tener un entierro como el
de Tierno Galván; mejor; será un viaje ligero de equipaje, como poeta de
calidad… Prefirió… dejar lo que ahora hay que cantar en manos de los
demás…”.
Andrés Sudón aborda su
“Animal”, canción energética, sin presentaciones. “Qué puedo hacer para obviar
esta parte de mi. Oigo bramar en mi pecho al ciervo que soy… Si cuando duermo
despierta de mi el animal; dale tu cuerpo y tu miedo sólo por piedad”. Canción
de ritmo potente y de letra poderosa, como una invocación de un brujo, llamando
al animal que llevamos dentro. Nos encantar acompañar su oh-oh-oh.
Ahora otra persona
energética. Victoria Loarte. Su propuesta de hoy es que nos besemos, porque acaba de enterarse
de que hoy es el día del beso. ¡Muac! Y ha elegido para cantarnos (y
bailarnos). “La esposa de la sal”. ¡¿De
donde saca esta mujer la energía?! “Soy la esposa de los peces de colores; soy
la esposa de las sales de tu baño; soy la perdición de tu frente; y en
Abril espero cada año hacer que
acerques; soy el Mediterráneo… ¡Agua!… Amor que derrites el calor, que te
mueres por mi amor; amor que me sabes a pasión, a ilusión, a canción, a
melón…”. Uf. Me deja agotado solo el oírla.
Para compensar, aparece
Marta Plumilla, que parece que ha estado malilla. Se le nota en los ojitos.
(Ponete buena). Nos canta otra preciosidad de canción: “Vacío”. (Vacía en el
vacío). “Vista desde allí parezco un ruin abrigo, de hámster en la rueda,
dándole al molino del gigante vacío… Vete yendo tú y pídeme una birra; no les
digas aún que estoy aquí, vacía en el vacío”. El vacío, la nada, lo que hay
antes de que lleguemos aquí, a darle a la rueda…
Andrés va a presentar la última
ronda de artistas, que tiene dos nuevos-viejos malochos y a una persona que
escribe desde Méjico.
Juan Antonio Ordóñez, que
no se prodiga mucho, a que anda metido en un bonito lío. Hace video-llamadas
por encargo para cantar una canción a gente que está confinada y de paso
charlar con ellos un poco. Además nos canta una canción nueva “Invisible
enemigo”, dedicada a nuestro querido, entre comillas, enemigo: el coronavirus. “Somos
eslabones, no hay primas y bordones que puedan bastar, entre un King-Kong
vencido y un domino caído nos queda luchar con la vida a cuestas, volver a
cantar”. Venceremos una vez más. Pero perderemos también. Es la manera que
tenemos de aprender. Nos manda todo el cariño.
Vaya. Aparece un hombre
con cara de susto. Se nota que es la primera vez que emite en directo. Juan
Fernández Fernández nos coloca una vez más su buen gusto musical y su talento. “La
felicidad no es una canción, es un niño sin tiempo… y una madre que ve llegar
un tren; un hombre que llega a casa, un árbol
que toca el cielo… Yo fui contigo el niño, el hombre, la madre, el gato, el árbol”.
Una preciosidad de canción. Amable y limpia. De la interpretación no hablo
porque ya conocemos todos la forma de tocar la guitarra de Juan y su voz
inconfundible. Gracias.
Y entra en directo ahora Norte. Hoy nos
trae un blues que tiene aún a medias. Será cortito porque alguna parte puede
ser improvisada. Como esto es un Micro
Abierto, se pueden tocar canciones a medias. ¡Bueno! ¡Eso lo dice usted! Ja ja.
No es muy alegre; un blues, claro. “Nos conocimos sin querer. El universo nos
engañó. No llegamos a tener ni siquiera una canción. No se puede recordar lo
que nos sucedió. No llegamos a tener ni siquiera un color”. Como blues, muy
bien ejecutado, muy bien cantado. Dan ganas de cortarse las venas.
Tenía que haber aparecido
Jessica Robarte, pero en su lugar aparece Andrés, que explica que ella actuará
mañana. Va a hacer el sorteo. Ah. ¡No! Se
le había olvidado un participante; Goiko. Así que Oscar entrará tras este directo.
Hace el correspondiente sorteo y nos despide hasta mañana. O sea, primero,
Goiko, luego el sorteo, después los aplausos diarios y, por último, a componer
la canción para el taller “Ahora”
Efectivamente. Goiko no
está. Hay un hombre con pinta hortera, chándal naranja, escudo del atlético,
gafas de sol, visera… y un ritmo de fondo como de bakalao barato. Ah, no. Es él.
Es Goiko transformado y con una voz como de ultratumba. “Como Camilo se quejó
el otro día en la crónica este otro Goiko se ha cargado al Goiko moñas” y nos
pone a bailar. Viva la marcha. Buena forma de acabar el micro. “Amigos míos, hoy
estamos aquí. Empieza el festival. Muy bien cargado traigo iPhone-mil. Le toca
trabajar… Este es mi sitio; todos saben que soy el rey de Instagram. ¡Todo un
chou! ¡Estupendo! Ha sido muy bueno empezar con la energía de Ernesto y acabar
con la “performance” de este actor-cantautor. Bravo.
Y mañana más.
"Podéis ir en paz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario