jueves, 23 de abril de 2020

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (561). 20/04/2020. Taller "Ahora".


Por: Camilo Crespo.
  
(Los videos de este micro se pueden ver en el muro del grupo Micro Abierto Libertad Ocho, de Facebook)

”Oremos”.  Buenas tardes. Hoy es un día especial. Ya. Ya sé que lo dije también la semana pasada. Pero,¿no es estupendo que cada día sea un día especial? Pues lo es, sí señor. Hoy celebramos la primera parte del taller “Ahora”. Hoy me va a resultar fácil poner el nombre de las canciones (mi chiste malo). En principio (no sé si alguien actuará fuera del taller) todas se llamarán “Ahora”. Hay, de momento, doce personas apuntadas para hoy y catorce para mañana. No está mal, nada mal. Estamos todos un poco nerviosos, pero ilusionados. Cómo no.

Y empezamos. Andrés nos da la bienvenida. Ante todo explica para la gente que no los conoce, lo que son los talleres del micro abierto. También hace un poco de historia. Y explica la importancia de este taller, especial por estar en confinamiento, por ser el primero online y porque está muy relacionado con lo que nos está pasando.


El primero hoy es Antonio Espinosa, que plantea su tema haciendo resaltar, me parece, el tiempo que hemos perdido antes y que ahora no podemos recuperar. Y que estamos todos metidos en este maremágnum y que es mejor que nos llevemos bien y ayudemos por el bien de todos. Por supuesto que ésta es mi apreciación. “Ahora que somos como hermanos, y nos brota la solidaridad, por qué no empezamos a mostrarnos con mas respeto y nos dejamos de incordiar”.

Juan Fernández Fernández ha tenido problemas (tras una encuesta realizada entre el publico, hemos determinado que ha sido el gato-hacker que andaba por su alrededor). Pero volverá a intentarlo más tarde.


Entonces entra Oscar Goikoetxea, con una pieza apoyada en un ritmo sacado de su propio pecho, muy atávica la sensación que despierta. Su texto echa la vista atrás (“Me subo a un alto desde el que observo el cuadro envejecer, y aquellas historias que estudié de ancianos milenios que abordé”), antes de pensar en qué será lo que ocurra a partir de ahora y apostar a su vez por un esfuerzo común. “Pausa, que congelada, sabrá abrir, abrazar nuestras pieles y sentir que todas nuestras sangres son de un mismo color”. Y añade como consigna un “Despiértate. Abrázate. Respétate. Desnúdate”. Está claro que cada artista mira la palabra “Ahora” desde distinta esquina (Y no hemos hecho más que empezar).


Y ahora llega una persona nueva, Amanda Fernández Bartolomé. Y como es nueva, se hace un pequeño lío (nos pasó a muchos ya) y emite en su muro. Luego lo comparte en el muro del Grupo. Con una especie de guitalele o similar afronta una melodía con aires años veinte del siglo pasado, hablando del confinamiento mediante palabras clave y de la esperanza de que volvamos a abrazar a nuestra gente algún día. “Eternas jornadas de besos pendientes. Muy pronto estaremos muy juntos de nuevo. En casa, me quedo. Ahora toca cuidarme así. En casa me quedo. Ahora toca cuidarte así”. Muy agradable. Cada cosa tiene su lado bueno y este es el lado bueno del micro online: lo accesible de gente lejana.

Andrés hace mención a las dificultades que estamos teniendo hoy con Internet. Comenta también que se van a crear álbumes con los directos de cada edición. Y da paso a la segunda tanda.


El primero es otra persona que es nueva en el micro online. Se llama Daniel Cárceles. Se apoya en guitarra acústica. Con un buen ritmo de púa, ataca una canción llena de esperanza en el futuro y de intención en vivirlo así. “Recorreremos las calles hasta despertar, a ras de suelo o en la puerta de algún bar. Y a cada instante nunca he dejado de pensar, lo que daría por tenerte irremediablemente ahora…”. Se despide mandando deseos de empezar a tratar a la Tierra con más atención. A ver si se hace realidad.


Mi querido Andreas, Kalk Badan, nuestro poeta de cabecera, como le ha titulado Fernando Bárcena, y al que ya echábamos de menos, ha puesto de fondo el “Out on the weekend” del famoso álbum ”Harvest”, de Neil Young. Nos ha hecho una descripción del día a día en esta… cuarentena, que al final sí que va a ser cuarentena (y nosotros que decíamos que serian quince días). Y Andreas nos retrata como sólo él sabe hacerlo, la ciudad, el vacío de las calles y el reencuentro consigo mismo. “…Las acacias se pintan las uñas de lima, las aceras se cubren de grama, suspiran los balcones manantiales de pensamientos y nomeolvides, y de las fachadas brotan quetzales de luz”. Escuchar recitar a Andreas resulta fácil, como oír cantar a otros.


A continuación Sergio Sanz, que volvió a nosotros la semana pasada, nos planta su hacedor de sonidos (también llamado piano-sinte-meclador…) para cantarnos su “Ahora”. Crea un ambiente que me recuerda a nuestros tiempos de los Tangerine Dream. Esto, con su estilo de cantar copla y su verso tan sugerente y claro a la vez, da un resultado sorprendente. Pero reconozco que lo que más me gusta es su letra (buena idea ha tenido Andrés de pedir las letras con los vídeos). “¿Qué vas a hacer ahora, con la puerta abierta? ¿Qué vas a hacer ahora, con tu mente despierta? ¿Qué nos traerá aquella sociedad muerta? ¿Qué es lo que hará que el mundo se convierta? Me gustan las canciones que plantean preguntas. Y aquí no faltan. Gracias, Sergio.


Cómo no. Una nos aparece conjuntada, con su acostumbrado estilo innovador. También es agradable el entorno que ponemos a nuestros directos, claro. Y Una lo sabe hacer. Con un marco muy morado de hojas y conjuntado con su vestimenta, su “Ahora” habla de lo bien que viene aprovechar esta cuarentena para escribir, meditar, buscarse a uno mismo. “…Ahora es un drama para muchas y para otras una bendición. Ahora no le atañe a los mercados ni a la baja tasa de inflación. Ahora eres tú en tu espacio y tu  habitación. Ahora tú con el vuelo de tu imaginación. Tú con tu tiempo a tu disposición.”.

Esta tanda no ha tenido los problemas técnicos de la primera. Andrés aparece con un marco con forma de corazón. Le ha dado envidia Una. Nos recuerda que pongamos la etiqueta #cancionesAHORA en el vídeo. Estupendas canciones. Como siempre, el mismo título y distintas propuestas, distintas visiones. Sigue el nivelazo.


Juan Fernández Fernández vuelve a intentarlo y esta vez lo consigue. Guitarra eléctrica. Su canción habla -interpreto- de cómo puede acabar uno al cabo de la cuarentena. No muy bien, la verdad. “Las baldosas tratan de evitarme. Yo tampoco las quiero pisar. Pero pesa tanto este pijama… ¿cómo llegaré hasta el sofá? Debo repetirme que estoy bien ahora”. Esta vez ha elegido una base musical más sencilla que de costumbre, y que me recuerda a las películas de Jacques Tatí, muy adecuada al tema que trata.


Por fin Fernando Bárcena hace su aparición. La semana pasada no pudo ser. Rodeado de su mundo de libros, con su guitarra clásica, su arpegio cuidadoso y su voz sobresaliente, nos habla de su encierro, de sus libros, de su pensamiento y de lo que vive en esa situación: “ … ahora que el tiempo es un centro donde las piezas encajan, ahora que sé lo que pasa, yo ya no quiero salir, ahora que ya no me basta cuando te digo: «Te quiero»”. Muy bello tema.


Y del retiro suave de Fernando, pasamos a la luz brillante y la energía de Victoria Loarte. Pero su canción hoy no es la usual. Más intimista. Su letra habla de un ahora para salir un momento del mundo del encierro, pero no hacia la calle, sino hacia dentro. Adentrarse en sí misma, recogerse en sí misma. Y una bella letra de añoranza. “Ahora es tan sencillo tan lleno de magia. Tan sencillo que no se acaba, tan sencillo mi mar en calma; ahora, por fin ahora, sin fin ahora, sumergida. Sumergida en el ahora”. Gracias por tu expresividad que siempre transmite positividad.


Javier Gijón Conde ofrece unos bellos acordes para comenzar su canción. No parece hablar de esta cuarentena, sino de la fragilidad del ser humano y de las cosas que parecen ofrecer seguridad (Perdona, Javier, si no lo interpreto bien). Creo que esta letra hay que leerla varias veces. “Paralelas que se esconden se entrecruzan entre si, en un infinito estrecho que se rompe entre tus pies. Aprendimos con el tiempo a escuchar en el color, a volar en los rincones en un bosque de cartón”. Bella, aunque con un punto de tristeza, me parece a mí.


Y claro. Tanto corre Ernesto, que se apuntó el primero y sale él último (se actúa en orden inverso e ese en que se fue apuntando la gente). Ya me extrañaba no verle. Y le vemos con una guitarra en la mano. Parece que es la guitarra más desafinada de la tierra, comenta. Y comienza a cantar en euskera, apoyándose en su ritmo contra la guitarra. Podría ser una danza balcánica; canto de guerra. Pero tiene partes en castellano. “Ahora es siempre, todavía, aun; es presente continuo. Ahora, hasta la hora de nuestra muerte es ahora. Ahora y en la hora de nuestra muerte, amen-se”. Genial y vigorizante como siempre.

Andrés no debe de estar, En su lugar aparece un conejo con gorro rosa y orejeras, que lanza arcos iris cuando grita. Nos recuerda que esto sigue mañana. Y lanza el sorteo. 

Abrazos a todos.

“Podéis ir en paz”.


11 comentarios:

  1. ¡Gracias por dedicarnos tu tiempo!

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  2. Hermosa crónica, hermosos y diversos mundos, íntimos, tan personales. Uno siente la tristeza y la alegría, lo frío y lo caliente, el desafío y la quietud. El anhelo de cambiar el mundo en algunos, la fe en que eso sea posible, el escepticismo -ni cínico ni hiriente- en otros. Yo, que soy un ser que se lleva bien con el confinamiento, rodeado de mis libros y cuadernos, junto a mis guitarras y mi música, veo esos mundos que mis amigos cantores me cantan y sinto una nana, una caricia amable, un consuelo en la fatiga y la desolación. La desolación, porque muchas cosas van a cambiar. Sí, existe la bondad y la maldad, los gestos pequeños de los sinceros y los gestos grandiosos de los que quieren sacar réditos a esta situación, en la política, en la economía, en la social, en la educación.No sé si saldremos mejores de esto con sociedad; me temo que no. Pero si hacemos cada uno nuestro trabajo con nosotros mismos, si cultivamos las únicas cosas que hacen posible que esta vida merezca la pena de ser vivida -el amor y la amistad- entonces estamos quizá a tiempo. Gracias, gracias, gracias. Fernando B.

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    1. Muchas gracias a ti, por darnos siempre un punto más alla sobre cada pensamiento. "cada uno nuestro trabajo con nosotros mismos" Ahí le has dado de nuevo, Fernando. Un abrazo enorme, compañero.

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  3. Otra vez inmortalizado para la posteridad en una crónica del hombre 'crónicol'; Camilo Crespo gracias por hacer este trabajo.
    Aparte de creador de himnos y canciones 'hondas' nos dejas tus observaciones cariñosas y aportes desde el compañero que decide hacer por los demás esta crónica que nos inmortaliza en el escrito.
    Estoy muy agradecido de compartir cartel con tantos tantas, seres humanos con sus estilos y sus palabras desde contextos, circunstancias, lugares diferentes y finalidad igual, la misma. Mostrarnos, recitar, contar, cantar lo creado para transmitir un mensaje wue transforme las mentes creando consciencia sentido y sensibilidad. Chin pum, chin pum, enCANTANDO estoy.
    Gracias Camilo Crespo. Gracias a todos y todas por el nivel.

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    1. Eres la leche. Sin tíesto no sería lo mismo. Estoy encantado con todos los comentarios. Por fin una he hecho crónica viva. Viva! Gracias por tu empuje. Abrrrrazo!

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  4. Me siento CRECER (viendo , oyendo, formando parte, aportando una parte). Gracias.

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    1. Esto es lo bonito de esta aventura. somos un puchero haciendo chup, chup. :-)

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  5. Muchas gracias, como siempre, Camilo, está muy bien interpretado por tu parte y afinas bastante con tus comentarios. Un abrazo amigo.

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  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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