miércoles, 4 de marzo de 2020

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (547). 2/03/2020


Por: Camilo Crespo.

(Los videos de este micro se pueden ver en Twitter, hashtag #MAL8_547) 

”Oremos”. 

Hoy hay cierto temor en el ambiente. ¿Podrá la epidemia innombrable (porque estamos cansados del oírla por todas partes) con las ansias de cantar de los cantautores? ¿Habrá gatitos maullando a destiempo? ¿Se casará Manuel con su novia de 15 años? ¿Quién leches es Manuel?... De momento el ambiente está tibio. Poca gente, pero, como es lunes, parece normal. Por otro lado hace una tarde preciosa. Dan ganas de cantar. Y eso haremos.

Hacemos la prueba de sonido al compás del “500 millas” de P.P.& M. (buscad, buscad). Y a esas alturas ya la lista de actuaciones está prácticamente completa. Incluso Julio Trac ha llegado a tiempo, perdiéndose su siesta. No se puede tener todo.

Una de las cosas que nos agradan en el MAL8 es que la gente vuelva. A pesar de tener sus agendas ocupadas, algunas personas recuerdan dónde empezaron a sentirse cantautores. Hoy tenemos para abrir el micro, nada más y nada menos que a Ángel Calvo, el cual, recuerdo, nos dejó ojipláticos en el último “canciomatón”. Es un valor seguro. Hoy nos trae un tema titulado “Fósil”. Pero primero nos recuerda que tiene actuaciones el 13 de Marzo en Badajoz, y el 14 en Cáceres. Además deja para el sorteo su disco “Esperando”, con cinco temas que son una delicia para el oído. El estilo de Ángel es bello y suave, algo naif -si se puede decir en música-, con una composición y una ejecución muy pulcras. En sus canciones no hay vacíos. No falta ni sobra un acorde. El tema de hoy sigue esas mismas normas. “El momento se hizo recuerdo y el recuerdo inmóvil; inmóvil lo arroyó el tiempo, hasta que el recuerdo se hizo fósil”.

A continuación sale Ruchele, que se está animando a traer temas con “mensaje”. Hoy es especial, porque nos cuenta que se ha matado un amigo suyo, de antes de venirse a Madrid. Este es el resultado de musicalizar versos que su abuelo le mandaba a su abuela desde el frente, en la guerra Civil Española (1936-1939). Es otra forma de reivindicar la memoria histórica. Y muy bella, por cierto. “Que contraste tan horrible; sin ti veo, vida mía, lo que recorrimos hace tiempo, con dulce melancolía, hoy lo vemos con el fragor de la lucha, con la imagen de la muerte… Lo que era como un niño, es ahora un hombre inerte”. Imágenes duras como bellas...

Mayumi nos deleita al piano, con su estilo sentido y delicado, una canción Japonesa. Sólo puedo añadir el título traducido: “En medio de la calle”.

Por último sube Fresco Norte. Antes de nada, anuncia su concierto para el día 15  de Marzo, en Calvario, junto a Quique Montero. Nos trae algo de lo último que ha hecho: “Dónde se ha escondido la verdad”.  Con un aire fresco e igualitariamente reivindicativo canta “Cantautores a cantar, escritores a escribir, poetas a recitar… Cantautoras a cantar, escritoras a escribir, poetas a recitar… el futuro que vendrá será siempre menos gris”.

Andrés da paso directamente al siguiente grupo, que empieza con Camilo Crespo (yo). Camilo de vez en cuando tiene problemas con el ritmo de sus canciones nuevas, más que con la letra. Y esta vez no va a ser distinto. Me confiesa (confieso) que le hubiera gustado darle un poco más de aire a este tema dedicado a Cádiz y titulado “Qué tendrá tu vivir”. “Será que tú llevas demasiado tiempo siendo azul; será que tú bebes de un mar lleno de luz”. Bellos acordes para una ciudad tan especial.

A continuación sube Andrés Sudón. Nos recuerda que mañana tiene concierto en esta sala, acompañando a Marta Plumilla. Y reivindica su propio ser, como él sabe: tocando su guitarra clásica y regalándonos su energía y su buen hacer. Esta vez nos lanza su “Ansiedad”, que a los que ya la conocemos nos sigue pareciendo como una descarga eléctrica que activa nuestras neuronas. Y esa letra… “Ya quedamos pocos en mi mundo de niña; detrás de mi mente puede que aún existan los Reyes Magos, Dios y el Partido Socialista…”. 

Y llega una sorpresa. Mafee, esa persona tan imbricada en el proyecto de Marta Plumilla, que además grabó los videos de la gala reciente “Feliz-Triste-Vacío”, se atreve a subir al escenario con su ukelele a cantarnos un viejo y famoso tema de Françoise HardyRoger Gustave Samyn: “Tous les garçons et les filles”. Sólo puedo decir lo bello que es el francés. Mafee comienza un poco nerviosa pero se va asentando. Esperemos que vuelva pronto.

Ahora viene Julio Trac, que sigue peleando con un tema un poco complicado aunque muy bello: “Alfonsina y el mar”. Julio tiene problemas para llegar a tiempo al micro, pero hoy sí ha podido, lo que se agradece. Me gustaría escucharle el “Wandering star” o el “Durham town”, muy apropiadas a la grave tesitura de su voz. Pero eso son cosas mías…

El micro ya está lleno de público a pesar de esa maldita epidemia o circo, según a quien preguntes. Andrés ahora nos introduce a la parte más especial del micro abierto: la de los #nuevosparticipantes. Nos recuerda que cuando él volvió de Salamanca en 2011, en Madrid apenas había un sitio para cantar y que con mucha dificultad consiguió convencer al dueño de entonces de Libertad8 para que le dejase montar el primer Micro Abierto de cantautores, cosa que ya existía hacía mucho en el mundo anglosajón. Hoy en día hay micros abiertos de cantautores por toda España y Latinoamérica. Son un medio perfecto para establecer relaciones, para darse a conocer y para mover las creaciones.

El primero nuevo participante se llama Valdo. Toca muy bien el piano, tiene una voz clara  comunica bien. Luego me entero de que es alumno de Andrés en la Tai. Un buen valor sin la menor duda. “Llueves otra vez; te nublas y no ves qué fácil es volver a ser…”. Esperemos que vuelva pronto.

El siguiente nuevo se llama Gabriel de Mulder. Está muy nervioso. Pero canta y bien, que es lo que importa. Su tema es “Frente al mar”. “Quiero que corran dentro de mi piel los rayos del cielo del amanecer; quiero que huela a rocío y café; cada mañana sentirla nacer y que den ganas de vernos crecer…”

La última nueva participante es Raquel Morato. Trae una canción sobre un tipo de violencia muy particular. El hacer sentir a la otra persona que no es nadie, que no tiene valor. Por desgracia se en muchos matrimonios. Ella lo particulariza en el actual movimiento contra el maltrato femenino “aunque también se da al revés”, apuntilla. La canción se llama “Luz de Gas”, haciendo referencia a aquella famosa e imprescindible película homónima de 1944 y por la que Ingrid Bergman se llevó el oscar a la mejor actriz. El papel de maltratador lo bordaba Charles Boyer. La letra de la canción refleja esos primeros síntomas de que algo no está bien en la relación, así como la relación entre los maltratadores y sus madres: los famosos niños emperadores. Muy interesante. Aparte de eso, Una voz suelta y segura. Bien interpretada.

Una vez acabada la presentación de los tres participantes nuevos, seguimos con los habituales. Y nunca mejor dicho. La primera es la habitual Marta Plumilla, que mañana tiene concierto aquí. Nos canta su “Feliz”, al que ha añadido una muletilla. Las canciones van creciendo.”Ahora soy feliz pensando en California, pero… ¡ay! el invento de la felicidad…” Y deja una entrada doble para su concierto. Marta está que se sale, no cabe duda.

A continuación sube Daniel Romero, que deja su poema secreto para el sorteo... Nuestro poeta “mainstream”, pero en el buen sentido (sí, lo hay), nos recita tres poemas cortos. El primero, llamado “Ensayo”, basado en una frase que le oyó a Andrés Sudón: “ensayar es de cobardes”. Trata sobre este gobierno PSOE-Podemos, dando por sentado que fracasará, pero que al menos lo habrán intentado. El segundo, recitado de memoria, con lo que la dramatización mejora, llamado “Epidemia-2”. No hace falta decir de qué trata. Y el último está inspirado en el “Bella Ciao”, que parece entonaron el otro día en Calvario. (Algo apunté aquí que no entiendo. Me parezco ya a Rajoy; “no entiendo mi propia letra”…) Por supuesto se lleva los aplausos del público. Quiero comentar que en el micro se aplaude a todo el mundo, porque todos reconocemos el esfuerzo de subir ahí a dar a risa y corriendo lo mejor de nosotros. Eso sí, los aplausos tímidos los reservamos para las actuaciones tibias, como recompromiso. El público del MAL8 es serio, participativo y bastante ecuánime. (Opinión mía).

Ahora sube otro poeta, casi nuevo entre nosotros: Mi Antonio, con un sentido del humor encomiable, nos trae una lata de mejillones para “calmar esos gatitos que sonaron el otro día” (ver crónica 455 del lunes pasado). Hoy su “poema cantado” trata de “su” maldad. “Como soy malo no me quieren en el cielo pero en el infierno tampoco me quieren, no soy lo bastante malo… Ahora soy zombi, entre la vida y la muerte. Mi pecado en esta vida fue darte mi amor y que tú lo despreciaras para hundir mi corazón.” ¡Pobre!. Los poetas hoy parece que van ganando…

Sale el último de esta tanda: Marco Vacío. Anuncia que mañana tocará en el Camba. Siente perderse el concierto de Marta, pero arranca un ciclo de duetos de cantautores allí, de modo que mañana tocará a medias con Eva Calero. Taquilla inversa. Hoy nos trae una hermosa canción, llamada “Secretos en el vientre”, con esa guitarra tan aérea… “Me ofrecen la prisión, la muerte o e exilio… fuiste como una luz en toda esa locura…Prometo reencontrarnos cuando sea mayor”.

Antes de pasar a la última tanda, Andrés vuelve a recordar que mañana toca junto a Juan Fernández aquí con Marta Plumilla y que es una maravilla. Eso sí, concede que el Camba es un sitio estupendo y que el que lo lleva ama la música en directo. Que lleva ya varios intentos y que desea que este fructifique porque se lo merece.

Comienza la última ronda Una, que deja para el sorteo sus dos discos (“Fábrica de Cemento” y “Hueco de Ausencias”), acompañada de Tom Ferguson, que deja una caja de bombones de cacahuete con forma de corazón. Su canción “Oxígeno” trata del maltrato de los hombres (malos) a las mujeres (buenas)… La canción es muy buena. Habla de esa típica mujer que sigue defendiendo a ese hombre que la ningunea.

Salta Millás al escenario, lleno de energía. “Las Vegas fuera de juego, sólo desierto a la vista”. Habla de la falsedad del mundo basado en “los negocios”. El arte y los negocios son una mala combinación por lo general. Siempre pierde el mismo.

Y llega otra sorpresa, no por la persona, sino por lo que nos da. Andreas (Kalk Badan) trae su  aportación al taller “Elemental”. Su poema se llama “Téneso y Moscovio”. Y barre con la sala. Risas, llantos, sorpresa. Todo lo ha suscitado este chorro de texto bien escrito y mejor narrado. Creo que se lleva la mejor ovación de la noche.

 Ya para acabar esta tanda sale el perdido y vuelto a aparecer David Robert Primat. Hacía mucho que no bailábamos al ritmo del R&B. Sale cónsul clásico sombrero de ala corta  blanco y su camisa brillante. Y ¡claro que acabamos todos bailando en nuestros asientos!

“¡Vaya tanda tan…dispar!”, Andrés "flipa" con el micro de hoy, tan diverso, tan lleno de pequeños grandes momentos. Nos dice que él, al contrario de lo que se pudiera pensar de un cantautor, quiere que todo el mundo haga canciones, cuantas más mejor; porque así subirá el nivel y hace mucha falta. Ahora, antes de hacer el sorteo y despedir el micro, quiere invitarnos a escuchar a la mujer que va a hacer el concierto esta noche. Este mes todos los conciertos son de cantautoras, para darles visibilidad.

“La que viene esta noche es especial. Lleva la belleza y la diversidad a su propuesta. Es un nuevo valor que va a dar cosas muy buenas”. Presenta así a Elena Cormán, que nos interpreta “Cortafuegos”. “Aunque la llamamos la sangre”. “En cosa de un mes, las dos sangramos a la vez, la sangre que dice que todo va bien…Pero te voy a dar ti-ti-ti-ti tantos besos, que como quieras desconfiar, no ti-ti-ti-ti te van a quedar ganas ni tiempo…”  Tiene un buen gancho esta canción de amor. Y tiene una voz especial. Me quedaré a su concierto y se me hará muy corto.  Todo tras este micro tan especial que sólo ha tenido un punto negro, o sea, la gente que se ha quedado fuera. Hoy ha sido Alejandro. Hemos actuado 20. Y mañana más y quizá no mejor pero sí igual de intenso.

“Podéis ir en paz”.

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