Por: Camilo Crespo.
El
video en directo se puede ver en el Canal
deYouTube de Libertad8 :
O directamente: https://www.youtube.com/watch?v=FDFrjffen7s
"Oremos". Buenas tardes. Andrés saluda a
los presentes y onlainers. También saluda a los que quizá vean este
video dentro de 16 años. De repente se calla. “No –explica-, es que no quiero
molestar (se refiere a una conversación en la sala)…Perdonad. Es que desde que
soy profesor no hay quien me aguante…”. Una vez pillada por los implicados la
indirecta, nuestro presentador continua, explicando que esta sesión especial
del micro es la última porque van a comenzar las obras de insonorización y
Libertad 8 va a estar unas semanas cerrado. Lo que no sabemos es cuántas
semanas. Hoy, de momento, vamos a darnos un buen atracón, ya que no hay límite
de tiempo, aunque tampoco debemos abusar, puntualiza. Enumera las
particularidades del MAL8, como son los cuatro minutos por actuación (hoy menos
estrictos), las crónicas, nuestro cazador de palabras, el sorteo final y el uso
del piano y de su guitarra (sin púa y sin percusiones). A continuación pasa
lista y comienza el espectáculo.
Juan Antonio Ordóñez, malocho de pro, abre esta sesión. Hoy trae estreno,
pues está preparando un nuevo disco, que verá la luz, explica, cuando la luz lo
encuentre. Así que está componiendo. Por fin. Nos tenía un poco preocupados a
sus seguidores. Su canción de hoy se titula de momento "Al vivir",
aunque admite otros títulos. “Pasan los años y pasa mi vida, que pasa en un
sueño. Nacen y mueren canciones. Sólo perduran canciones. Y no es el ayer ni el
mañana. El hoy siempre en la ventana, sin poder pararse en el tiempo, deteniendo
el reloj un momento al vivir”. (Qué bonito tema, don Juan). Antes de bajarse
deja constancia de su amor por el micro y por Libertad 8.
Make Delcan se entretiene un poco colocando la letra en el atril. Pide disculpas y dice que su canción se titula "A tus espaldas". Con ritmo muy lento y aires de blues, comienza. “Dame calor. Pásame un cigarro, que tengo el corazón hecho pedazos y no sé qué hacer, después de esta conversación. Sé que acordamos que lo nuestro era de paso. Pasar buenos ratos y cada cual por su lado, pero que le voy a hacer. No pensé quererte tanto…”. Una voz muy particular la de esta artista y una letra directa y efectiva.
Ernesto Arango pone funda al micrófono antes de nada. Va a cantarnos “Analfastrónomos,
analfastrónomas”, del monográfico “Lunas, soles, dioses y supernovas”. También
comenta que por las mañanas está haciendo unos paseos por la Casa de Campo,
durante unas tres horas, por si a alguien le apetece apuntarse. Hay un
anfiteatro por allí muy apropiado para ocuparlo con nuestras actividades y tal.
Bueno, y como ve que se está enrollando, comienza a cantar. ”Luna, Sol, espacio
interestelar. Banderas en la luna, yo no he puesto ninguna. Estrellas fugaces,
guías celestiales. Analfastrónomos, analfastrónomas. La ternura de mirar y ver
la nada celestial...”. Ernesto canta con ritmo rápido, según suele.
Karma Olivié
comenta que vamos a pasar una temporadita sin subir a este escenario, pero que seguro
que Andrés encuentra la forma de hacer alguna cosa parecida mientras. Deja para
el sorteo un comodín de entrada para uno de sus próximos conciertos, a elegir
por la persona afortunada. Nos canta su tema "Luna", para lo que
tiene que tiene afinar la guitarra de modo especial. “Creo que podría hacer
algo, sólo con creer que puede ser sano. Veo a través de ti. No me planteo si
es bueno o malo. Suave comprendí tu sombra, tu luz y tu halo…”. Buenos cambios
de ritmo y buena marcha.
Sergio Sanz
deja para el sorteo un llavero de arcilla con forma de infinito y un mini dibujo.
Dice que en su canción del taller "Mal" están todos los poetas del
MAL8 con los que ha aprendido tanto. Menciona a varios malochos. Y se sienta al
piano para cantarnos. “Mala mente que se
me escarcha en la frente espantosa. Que se genera en la inepta prosa y me
resulta retozante manta. Nostalgia y duelo que se clava laxa en ese cielo que
corrompe el beso. El de mi boca que ya es casi hueso. De aquel pasado que me
clava el dedo”. Hermosa voz llena de copla.
Tras esta primera tanda, Andrés dice que aunque éste
sea el último micro antes de la obra, aún quedan unos días para hacer cosas
aquí. Así, por ejemplo, mañana habrá algo especial, que luego contará. Y hay un
hueco el viernes para un concierto. Así que anima a que alguna persona, o
varias, de las presentes lo aproveche. Y seguimos.
Erchavi derrocha
buen humor. Dice que, como en casa ensaya en el sofá, aquí podía haber un
asiento parecido. Lo más que puede hacer Andrés es traerle una silla, algo más
baja que el taburete habitual. Nos cuenta la receta de las “salchichas en su
tinta”, muy original y pringoso. Después canta: “Que duermen las cuajadas,
temblando como un flan. Porque si se despiertan, vendrá el coco y se las comerá.
El emperador está mejor en el congelador, el mundo sin chuletas que me den la brasa
y las conservas sin abrelatas. Se me ponen los huevos de corbata, por culpa de
la sangría. Qué hacen cuando estallan las granadas que han puesto las judías…”.
Bravo, Erchavi.
Andrés Sudón
le da un golpecito a su guitarra y en la sala se oye un sordo rumor de reproche
y algo más que un rumor, pero él explica “a ella le gusta que se lo haga yo”.
El 12 Mayo, fecha en que murió Antonio Vega, recuerda, vuelve su Proyecto Andrés
Sudón. En la sala Juglar celebrarán su primer aniversario y el lanzamiento de
un EP. "Despertad", explica, es una canción muy importante para él,
porque refleja la intención de ese proyecto. “¿De qué me ha servido despertar,
si todas las demás están durmiendo? No soporto esta soledad, entre almas
sonámbulas, ajenas a su propia luz. La luz que alumbraría un mundo nuevo. ¿De
qué me ha servido despertar, si casi todo el mundo está durmiendo?…”. Otra
muestra del genio de Andrés, como no podía ser de otra manera.
Danko esta
vez trae un tema “mezcla entre el género efímero y el género atrevido, casi arriesgado”,
pero como esto es Libertad 8, pues no hay problema, añade.
"Escándalo" se titula. “...Inmigrante ilegal, asentado en el país, ocupando
un chalete y viviendo de postín. Le
van a dar una paga y otra para su mujer. Ya se quiere empadronar y a sanchinflas poder votar. Escándalo, es
un escándalo, es un escándalo este país…”.
Rafael Baena,
como contraste, nos deja versos de amor popular en el aire. “El tiempo me llama
como un sudor. El tiempo me llama, me sale del corazón. El tiempo me llama, a
mí me da calor. El tiempo me llama y sale todo lo mejor. El tiempo me llama y
qué quieren de mí. El tiempo me llama y por él la luna me dice así. El tiempo
me llama, yo lo quiero vivir. Pero no sabe la gente lo que soy feliz…”.
Juanlu Mora
dice que nos va a recitar sus preciosas (esto lo digo yo) "Décimas al
libertad", por si con la movida de la obra, cambia este lugar. Explica que
son ocho décimas y que el último verso de cada décima es igual al primer verso
de la siguiente. Y que el último verso de la última décima es igual al primer
verso de la primera décima. De esa manera se cierra el círculo y puede ser un
infinito (un 8 tumbado). “Algo tiene este escenario, sobre el que poso mi peso,
que uno sube y queda preso de un afecto extraordinario. Hay un barco imaginario,
varado en este lugar. De este rincón, y hacia el mar en que se encuentran
ustedes, el artista echa sus redes, tejidas con su cantar…”. Siempre el amor anda
alimentando el alma, mientras que el odio la consume. No hay duda.
Y sube Andrés y comenta que luego, cuando lleguemos y
veamos que todo parece igual diremos lo de “tanto para nada”, pero esperemos
que no sea para nada. Que sirva para poder meter sonido sin problema. Anuncia
que ya hay concierto reservado para el viernes. De momento es un solo artista,
pero puede haber otro. A ver qué pasa. Y mañana sesión de Improcaces, ese
ejercicio de improvisación en vivo y en directo, que siempre sale genial, en el
que nadie quiere subir al escenario y luego nadie quiere bajarse. Y vamos con
otra tanda...
Marta Plumilla nos vuelve a cantar su nuevo tema, titulado “Oh, Virgen”, de
estilo gospel y que canta contra los "machirulos". Muy oportuno
esta tarde, visto lo visto. “Oh virgen, líbrame de ellos. De sus manos largas
sobre mi cuerpo. Líbrame de de sus manos grandes contando mi dinero. Hoy
líbrame de sus viejas bromas, de sus rancios credos…”. Marta ha vuelto a dar en
la diana. Este tema cada vez me gusta más.
Sofía Idoia
nos va a leer su poema titulado "Sangre" y no es casualidad que se
llame como ese concierto. Es que no pudo asistir a él, pero tenia su poema
escrito. Y aquí lo adjunto.
Posibilidades remotas brotan, crecen y pierdo la noción del tiempo. El acantilado, de acción sediento, saca a rodar guijarros. Y a mi sopor le sepulta el barro de una caliza en su acento. Mientras el plasma tirita las venas, los soldados del rojo alzan sus lanzas y, libres mis vasos, brindan sus letras. Terminan días impuestos, vuelan las balsas aceras. El viento sopla banderas, mi rostro adopta sus gestos. En el hueco que rellena el deseo, vive la hoja en el hada del trébol. Cuando exhala de suspiros un limbo, la fragua iza sus cúspides credos. ¿Conoces mi secreto? Lo he guardado tan dentro que el rubor solo pinta mis huesos. Por eso no lo verás. En mis plaquetas circulan rumores. Dicen que te palpita mi eco. No sabrás si es cierto o desierto. Por eso no lo dirás. Ahora se sincronizan los pulsos. Lo que late nos delata en su palmeo. Ahora trota el baile de ruidos zuecos. Rendida huelo a sangre y me mareo.
Nicolás Caicedo (Nick) va a cantar un tema en inglés por cambiar un poco. Buen ritmo y
alternando una voz suave en la estrofa con otra plena de fuerza en los
estribillos. Al final se lleva al público de marcha. Muy bien interpretado.
Diana (Me Quiere Sonar) recita tres como suele. Dice que quizá en la siguiente temporada cambie el formato, pero de momento sigue así. Los dos primeros poemas son de talleres del MAL8. “Azul” es el primero. “Esos besos que nos dimos en la noche, bajo aquella Inmensidad que nos envolvió a los dos en una estrella como si nada malo pudiera pasar…”. Continua con “Rosa”, que comienza así: “Ay, rosa, rosita, rosa. Siempre te recuerdan por tus pétalos y espinas. Entonces un ramo de rosas eso sería la vida”. (Este me gusta especialmente). Y termina con uno cortito: “Todo no es bonito. Todo no es justo. Todo no es auténtico. Todo no es verdad. Todo no es arte. Todo no es libre. Todo no es amor. Todo no es real y yo… yo no soy todo”.
Carlos Recio
agradece los aplausos del recibimiento y un “guapo” que le sueltan. Pero,
añade, él es más atractivo que guapo. Y atendiendo a lo explicado antes por
Andrés dice que le digan a Julián que el viernes tocará aquí con Juan. Va a cantar “Dos hijas después” y, como es
natural, se enrolla un poco presentándola, pero poco. “Otro lunes más sin dejar
de fumar, saldando dudas. Otro nunca jamás, ni lágrimas ni brugal, no hagas preguntas.
Otra canción capaz que llega tarde y mal, sin sal ni azúcar”. Este hombre cada
día me gusta más.
Andrés anuncia la última tanda del micro hasta
después de las obras. Y confirma que el viernes actuará Carlos Recio acompañado
por Juan Fernández. Y dice que hay un hueco para actuar el sábado a las 6 de la
tarde, por si alguien más desea hacer un concierto. Anuncia que mientras
Libertad está cerrado, habrá algunas actividades, como una quedada a propósito
del taller “Calles de Madrid”. Cada participante usará la etiqueta #callesdemadridMAL8 y hará un directo
entre las 5 y las 7 con su tema en el muro de Facebook del Grupo del MAL8. Y
después quedaremos en un parque para hacer un micro abierto al aire. Explica
también, ante los comentarios surgidos en el chat, que aquí todo el mundo puede
decir lo que desee en su actuación. Y si a alguien no le gusta, que responda
con su propio tema, porque en Libertad hay libertad de expresión. Y vamos a por
la última tanda, en la que habrá #nuevosparticipantes,
Cuejero (Javier) es nuevo. Es bajista y compositor, explica. Su tema se titula "Pintura de color". Anuncia primero que el viernes toca con su grupo en el Club 33, en Lavapiés. “Si yo fuera sombra de un olivo, no podría ocultar las hojillas que esconde mi rama ni la lluvia que cae. Si yo fuera viento de un molino, no podría impulsar la veleta que rompen el grano y el agüita que cae”. Versos lorquianos que me recuerdan al estilo de Triana.
Caro Ferrer
también es nueva. Viene de Medellín y hace constar que nadie ha dejado nada
para el sorteo. Ella deja una pegatina artesanal para pegar en las guitarras y un
banano. Canta a capella ayudándose de un triángulo. “Rodando por encima de los
cuerpos, me desnudo con mi voz. Suelto el control. Buscando y nutriendo me
desvelo, recordando sin dolor y con amor. Y todo se repite en este vuelo. Todo
vuelve al inicio y más intenso…”. El público le acompaña haciendo ritmo con las
palmas.
José Manuel Rodríguez, uruguayo, no venia por aquí desde antes de la
pandemia pues le pilló en su tierra y ha tardado tres años en volver. Nos
interpreta juntos dos poemas suyos. El primero lo compuso en las sierra de
Madrid, en 2019. “Escucho el silencio. Tus latidos, los míos. Entre la sierra
escondida y de techo el firmamento, tu brazo en mi pecho…” Termina con uno de José
Ángel Huesa. “Te digo adiós. No sé si me quisiste. No sé si me querías. O tal
vez nos quisimos demasiado los dos”. Bienvenido, José Manuel.
Mauro y Santiago (guitarra y cajón), casualmente, son también de Uruguay. Llevan una
semana en Madrid y en España. Tienen el viernes concierto y regalan una consumición
porque la entrada es libre. Cantan a ritmo de candombe “Entre el fuego y el
vino”, canción que nació visitando su querido pueblito de Trinidad. “Pasa el
tiempo. Vuelvo al pueblo. Veré ese cielo azul vamos a vernos esta noche y
cantar esa canción. Entre el fuego y el vino qué calor agarré, cantando con
amigos hasta el amanecer…”.
Y ya no hay más. Bueno, sí. Quedan las palabras
cazadas por Ernesto Arango y luego
servidas en forma de “cadáver exquisito”. Un verdadero lujo para acabar el
micro, como siempre. Tras él, Andrés cierra este micro, repasando la lista de
artistas de hoy, despidiendo a los onlainers y celebrando e sorteo final, que hoy será
al parecer un poco raquítico. Y algún día, más pronto que tarde, más. Mucho
más. Abrazos a todos y hasta la vuelta.
"Podéis ir en
paz".
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