Ayer martes 5 de
Marzo del año 13, celebramos en Libertad
8 la edición nº 87 de MAL8 (Micro abierto Libertad 8). En la calle la lluvia arrastraba la
suciedad del aire hacia las alcantarillas, así como el poeta canta en su aire
para limpiarlo. Los participantes de esta sesión pensaban en sus piezas
mientras la lluvia les acompañaba hasta la calle Libertad, donde encontraron
oídos y almas receptivas. Cada martes nos reunimos compañeros poetas para
llover. Ayer fuimos trece los afortunados que disfrutamos de la magia del
escenario de Libertad 8. Además de
abrirnos en canal y enseñar las vísceras, también tuvimos la labor de elegir el
título del próximo monográfico-taller, que se celebrará el día 26 de Marzo. Por ello, cada
participante metió en una bolsa de terciopelo transparente un papel con el
título que quiso proponer, y al final de la tarde, sacamos uno al azar. Luego
os cuento.
El Primer participante de la tarde fue Pedro Chillón, que nos regaló una canción poco habitual en su
repertorio, Guitarramán (supongo que
se escribe así), la historia de Baldomero, un hombre que antes sus desgracias
cotidianas “se quita el traja de odiar” y reparte felicidad con su guitarra.
Nuestro amigo Donato no tardó en
sacar unos bongos y acompañar la rítmica canción del diestro Chillón.
Y fue, precisamente, Donato
el siguiente participante. Nos cantó una canción de espíritu funkie titulada Amor a contratiempo. Esta vez abandonó
su halo de melancólica experiencia para contarnos una entretenida historia de
seducción. No faltó su característica trompeta simulada con los labios.
Pablo Bermejo, el
siguiente en escena, nos trajo una canción, según él, en su “línea tranquila y
tierna”, en la que dice cosas como “cada día al despertar / me recreo en el
placer / de encontrarte tal y como te soñé”. Es palmaria la maestría de este
trovador a la guitarra y a la pluma. Solamente le pedimos que le hable al
micrófono a la cara, para que no nos perdamos ni un verso de su “tranquila y
tierna” literatura.
En esta edición nos visitaron artistas que no vienen
habitualmente últimamente, como nuestro querido Carlos Recio, que hizo en esta edición una de sus más sólidas
actuaciones. Nos cantó una canción de su repertorio titulada Mi puta realidad, en la que dice, por
ejemplo, “intenté atropellar al destino / metiendo marcha atrás”.
El compositor y pianista Rodrigo nos regaló una emotiva pieza en construcción, que comenzó a
componer antes de ayer por la tarde, pero que quiere empezar a compartir. No en
vano, en MAL8 es también un
laboratorio. Resulta que esta obra instrumental, titulada Próxima parada: vida, está motivada por una experiencia reciente. Rodrigo es enfermero, y se encontró
fortuitamente con un accidente de moto. Él mismo tuvo la oportunidad de reanimarle
y conseguir que llegara al hospital con vida. En la pieza transcurre la
historia, se pueden entender las sensaciones que quiere transmitir. Es muy
agradable el trabajo de este joven compositor sensible.
Tras la música instrumental pudimos escuchar poesía, una
mezcla apropiada para un micro abierto en el que predomina el género canción.
El porta Suso Sudón nos leyó, en
primer lugar, el poema que no pudo presentar en el monográfico-taller “Soledad”
de la semana pasada, titulado Sol [de la]
edad. Después nos leyó un nuevo poema titulado Hachazos al viento, en el que critica todo aquello que nos avoca a
una vida convencional de forma preestablecida. Me gustan los poetas que recitan
con todo su cuerpo y su alma, y hacen de la poesía algo espectacular.
Otro cantautor que tampoco viene habitualmente es el
peculiar Lui, cuya voz es capaz de
realizar contrastados cambios de registro. Su música es ligera, entre el blues
y el soul, de textos románticos e intensos. Nuestro amigo Donato se unió al ritmo marcado de Lui con sus bongos. Me gusta cuando desde el público se hacen
aportaciones que funcionan, al fin y al cabo, casi todos los que asistimos
somos artistas.
En esta edición tuvimos dos nuevos participantes. El primero
fue Agustín Sanz, que se puso en
contacto con nosotros a través del correo microabiertol8@gmail.com. Agustín se desvirgó, como él dijo, en Libertad 8 cantándonos dos canciones de
su repertorio, en las que nos mostró su contundente voz y su maestría a la
guitarra, además de sus versos líricos y urbanos, como “lo peor fue tu
refulgencia en aquella Atocha otoñal”.
Para el siguiente participante, nuestro segundo nuevo de la
tarde, fue una sorpresa salir a escena, ya que no esperaba ser llamado. Pero un
pajarillo que dijo que estaba recién llegado a Madrid desde Boston, y que era
un peculiar compositor. Su nombre es Daniel
Durán (sí, es primo de nuestro más que camarero Dani), pero no habla castellano a pesar de su origen. Como si ya
conociera la idiosincrasia del MAL8,
tocó dos piezas de unos tres minutos cada una. Su música instrumental está
entre lo más sencillo y lo más complejo, en un equilibrado punto medio, con
sugerentes cambios irregulares de ritmo y armonías que se rompen elegantemente.
A mí me gustó especialmente su música, así como su actitud.
Miguel de Paul
nos trajo esta semana una inspirada canción titulada Viejo blues de los nuevos tiempos. En ella habla de la situación
actual de una forma con mucha tradición, como es el blues. Su armónica fue
armónica, su guitarra estaba impolutamente afinada y todos oímos con bastante
claridad lo que nos estaba cantando. Quizá esto sea muy obvio, pero lograrlo
lleva su proceso, su esfuerzo, y merece ser reconocido.
Este puede que haya sido el MAL8 con menor número de participantes, aún así estuvimos actuando
hasta la hora a la que solemos terminar. Ya cerca del final llegó el turno de Marta Plumilla que cantó una de sus
originales canciones, esta vez dedicada a Pierrot, un protagonista de la
comedia del arte, nacida en Italia a finales del siglo XVI (viva
la Wikipedia), al que, en la canción de Plumilla,
se le termina el llanto y se queda sin su labor, llorar, “un payaso triste que
no puede estar triste, ¡que le corten la cabeza! Como siempre, una preciosidad
sensible y profunda.
El antepenúltimo de los participantes fue J. P. Woo, que tuvo la cortesía de leer
una traducción al castellano de la canción que nos cantó en su idioma natal, el
inglés. Tradujo el título como Barceló al
desnudo, y es una pieza dedicada a una exposición del artista español.
El penúltimo fui yo mismo, Andrés Sudón. Como la semana pasada hicimos el monográfico-taller “Soledad”, estuve pensando mucho en una canción privada titulada Soledad soleada, de modo que la canté en esta edición para resarcirme. Si alguien quiere escucharla, la volveré a cantar este sábado en el concierto que haré a las19.30 h. en Dog and Roll.
J. P. Woo |
El penúltimo fui yo mismo, Andrés Sudón. Como la semana pasada hicimos el monográfico-taller “Soledad”, estuve pensando mucho en una canción privada titulada Soledad soleada, de modo que la canté en esta edición para resarcirme. Si alguien quiere escucharla, la volveré a cantar este sábado en el concierto que haré a las19.30 h. en Dog and Roll.
El último participante fue Íñigo Coppel, quien después dio un
concierto en ese mismo escenario de Libertad
8. Pero antes de su actuación hicimos el sorteo en el que saldría el título
de nuestro monográfico-taller, que, como sabéis, consiste en que todos llevemos
una canción titulada del mismo modo. El último que hicimos se tituló “Soledad”.
Bien, pues durante esta edición de ayer, el MAL8 (87), los participantes escribieron en un papel una propuesta
de título que metieron en una bolsa de terciopelo transparente. Al final, una
mano inocente sacó el título, que fue “Gente rara”. No sabemos quién fue la
persona que propuso este título, tengo que investigar. Pues eso, el día 26 de
Marzo, haremos un monográfico-taller titulado así.
Y como dije antes, la última actuación fue la
de Coppel, que nos cantó la canción
de la edad media (los fans sabemos cuál es) de una forma espectacular. Nunca
había visto así de potente a Coppel¸ creo
que estaba al cien por cien. Fue simplemente sublime. Una forma
espectacular de terminar el MAL8 (87)
una sesión ordinaria que resultó, como es habitual, extraordinaria. Recordad
que el próximo martes día 12 de Marzo
haremos un monográfico titulado “Casas, calles, campos o mares”, es decir,
lugares. En los monográficos normales como este, tenemos que elegir una canción
de nuestro repertorio que tenga relación con el título, no es necesario
componerla para ocasión. Cuando sí será necesario componerla para participar,
será en el MAL8 (90), monográfico-taller “Gente rara”. Pronto
publicaremos en esta página las fotos del evento que cada semana nos envía Marta. Gracias a todos por vuestra
atención y por vuestros comentarios.
Andrés Sudón.
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