Ayer, martes 27 de Mayo de 2014, celebramos el tercer aniversario de MAL8
(Micro Abierto Libertad Ocho) en su edición nº 149, conmemorando que el 24
de Mayo del 2011 comenzó esta iniciativa en medio de la primera gran
revolución social del siglo XXI. ¿Qué mejor forma de celebrarlo que haciendo lo
que siempre hacemos: cantar? Pues eso hicimos, una sesión normal con el aderezo
de tres maravillosos años quedando cada martes para mostrar nuestras canciones
en Libertad Ocho, el templo de la
canción de autor. Nos apuntamos treinta y un artistas, y pudimos actuar
veinticinco de nosotros durante dos horas intensas y emocionantes.
El primero en actuar fue el
último que se apuntó a la lista oficial (tuvimos una nutrida lista de espera), Pedro Makay, quien comenzó este MAL8 (149) cantando la misma canción de
la semana pasada, ya que él sintió que podía hacerla mejor, o quizá porque
gustó mucho el martes pasado y quiso repetir la experiencia. De ella hablo en
la crónica de la semana pasada.
Agradezco la presencia del
siguiente participante en nuestro III aniversario. Julio Hernández, creador de Música
por la Voluntad (micro abierto –sin micro- al que acudo cada domingo
religiosamente), quiso acompañarnos y compartir una de sus canciones en esta
festiva edición. Nos cantó una canción que compuso para La Maremoto, aunque nos confesó que ella “sólo la canta en la
intimidad”. Una preciosidad, seguro que queda preciosa en la voz de Maremoto.
Estos días andaba yo pensando que
hacía mucho que no venía Raúl Ródenas
por aquí. Se lo comenté y me confesó que a él sólo le gusta venir cuando tiene
una canción nueva que mostrar. Me gusta mucho esa filosofía, porque el MAL8 es un buen laboratorio donde poner
a prueba nuestros experimentos. Por otro lado, me da mucha vergüenza ajena
cuando alguien viene semana tras semana aquí a canta su singuel una y otra vez,
cosa que nos ha pasado con varios participantes, como si esto fuera kissefeeme.
Pero Raúl ha entendido que lo que
hacemos aquí es ajeno al mercado. El MAL8
es un foro para compartir y crear arte, quien venga a promocionarse, puede
salir decepcionado. Eso no quita que algunos artistas lo hayan hecho (aumentar
su público) indirectamente. De hecho a mí me picaba el gusanillo de escuchar a Ródenas y pude hacerlo ayer, además con
una canción recientísima, Días de luna,
en la que habla en tercera persona: “cómo le desespera (…), cuenta nubes en
primavera, y tan sólo quedará perder a la luna y los días sin ella”.
Y, claro, los artistas que suben
a este escenario no hacen sino abrirse en canal y mostrar sus entrañas. Puede
que eso sea lo que me engancha al MAL8,
saber que detrás de las canciones hay personas reales e historias reales, como
la que nos contó Juan Carlos Cristiano.
Tenía un intenso idilio con una persona que tuvo que marcharse lejos por trabajo.
La última vez que la vio fue en la Gran vía de Madrid, calle emblemática en su
obra, presente en muchas de sus canciones: “En Gran Vía creí ver un destello,
pero me equivocaba, era la luz de tu mirada”, aunque ahora “ya no quedan
canciones tristes para la chica de los pantalones grises”. Pronto habrá nuevo
disco de Juan Carlos Cristiano,
producido ni más ni menos que por Antonio
de Pinto.
Qué bien que no faltó al III
aniversario de MAL8 Diego Mattarucco, uno de los malochos
más estupendos de nuestro extenso elenco. Su pulcra corrección le llevó a
cronometrar su intervención, ya que siempre pido que no nos excedamos de los
cuatro minutos en escena. En este breve tiempo nos hizo pasar un buenísimo rato
con sus “consejos cacofónicos” (“tenle renuencia de la renuncia”, “no siempre
lo mejor es mojar, el pene propone, pero no dispone”) y sus “dudas cacofónicas”
(“¿el que no está en forma, está enfermo?”). Maravilloso y queridísimo nuestro Diego Mattarucco.
Ya es un habitual en MAL8 el argentino Osvaldo Lindner, un artista que gracias a los numerosos micros
abierto que hay en Madrid, sale todos los días con su guitarra a compartir, allí
donde se puede, sus canciones. Canciones que son suyas por formar parte de su
alma, pero que en ocasiones son de otros autores. Como él sabe que a nosotros
nos gusta mucho escuchar creaciones propias, cuando hace una versión, nos lee
un poema de su autoría a modo de introducción. En este caso el poema se titula Impaciencia, y reza “sueño con tu boca
tierna”, entre otras cosas. La canción que nos cantó es bastante conocida, Entre la tierra y el cielo, de Paz
Martínez.
Hablando de los micros abiertos
de Madrid, permitidme un inciso para hacer un poco de historia en esta crónica
de nuestro III aniversario. En 2005 trabajaba yo en la sala Artépolis, y, entre
otras muchas cosas, me encargaba de programar conciertos de canción de autor.
Llamé a los que conocía para que tocaran allí, pero se me ocurrió crear una Jam
sesión de canciones para conocer a nuevos artistas. Los domingos hacíamos lo
mismo que hacemos ahora en MAL8,
hasta que me volví a vivir a Salamanca. Allí, también entre otras muchas cosas,
monté el Micro Abierto Salamanca,
que no coordinaba yo, pero sí lo creé para hacerlo en la sala de mi hermano Juampy, “El Esperpento”. Fue un éxito
arrollador, y terminé presentándolo yo mismo junto a Andrea Mazas. Lo que logramos fue crear un ambiente propicio para
el arte en una ciudad en la que la dinámica consiste en estudiar y/o emborracharte.
Mucha gente que necesita, como yo, un ambiente artístico y bohemio, encontró su
sitio en el Micro Abierto Salamanca.
Cuando regresé a Madrid, lo único que quería hacer era sacar adelante mi
carrera como cantautor, pero vi la oportunidad de renovar los aires ancestrales
de Libertad Ocho. El dueño de por
aquel entonces aceptó mi propuesta, y en pocos meses llegó el éxito. Por
suerte, otras iniciativas similares comenzaron a mover a bastante gente, y
ahora puedes venir a Madrid y formar parte de estos eventos que reúnen a personas
ávidas de canciones, tanto de cantarlas como de escucharlas. Como dije antes,
yo estoy enganchado a MXV, por
ejemplo, pero en muchos otros sitios sucede esta magia. Me alegro de que el MAL8 sea el paradigma para micros abiertos
de toda España. Para que nuestra historia quede registrada, escribo estas
cónicas; y ahora estamos a punto de sacar nuestro primer disco con canciones
hechas en nuestros talleres. Aquí dejo un enlace para poder participar
en nuestra campaña de crowdfunding (o campaña de mecenazgo popular).
Precisamente la semana que viene hacemos otro taller, aquí dejo el evento deFacebook, donde están detalladas las instrucciones para participar. Gracias
por permitirme este inciso historiográfico, ahora sigo contando lo sucedido
ayer en el MAL8 (149).
Son muchos los estilos musicales
y los géneros que forman el gran crisol que es la canción de autor. Aquí
tenemos representantes de todos ellos, incluso de algunos que creíamos
desaparecidos. Ángel de Andrés es el
adalid de la “canción ligera”, un cantautor que mantiene viva la llama de la
canción romántica y ligera que se hacía en los años sesenta y en los setenta. En
esta edición nos cantó Corazón caminante,
“una historia de amor adolescente que nace a la sombra de un limonar”, según
nos contó en su presentación. En esta historia, los amantes se vuelven a encontrar
pasado el tiempo, y ella le descubre que “yo soy la flor de tu infancia, yo soy
la fragancia de tu limonar”. Como es habitual, no faltaron las palmas que
siempre nos arranca Ángel de Andrés.
La poeta Oropéndola dedicó su intervención a los maestros y maestras, y en
concreto a su hermana, que trabaja en una pequeña zona rural de México. En Maestro, Oropéndola agradece a los docentes su gran labor, “forjaste gente
de bien”.
Antes hablaba de los micros
abierto de Madrid, de venir aquí y pasearte por todos ellos para mostrar tu
música y conocer a gente bonita con tus mismas inquietudes. Es el caso del dúo Estirga, que se presentaron la semana
pasada en MAL8 y han hecho la ruta
de los micros abiertos, cerrando el circuito ayer de nuevo con nosotros. Se
despidieron hasta la próxima vez con una bella versión de Luz de luna, de Álvaro Carrillo. Un placer conocerles.
El siguiente participante es un pilar
fundamental del MAL8, no sólo por
haber participado en casi todas las ediciones desde que vino la primera vez,
sino también por ayudarme en su funcionamiento, por presentarlo cuando yo no he
estado y por alentarme, cuando estaba quemado, a seguir adelante con todo esto.
Por no hablar de los hermosos regalos que me ha hecho para celebrar los
anteriores aniversarios. Hablamos del cantautor Manu Clavijo, un incansable e imparable trabajador de la música y
de la canción, que en esta edición trajo una versión de uno de sus maestros,
José María Guzmán, Julia, compuesta
en 1978. Manu nunca deja de sorprendernos y de darnos amor y
talento.
Y, hablando de talento, el
siguiente participante fue el gran Caso
Omiso, que presentó su canción Orillas
diciendo “soy el fantasma de José María Tezanos Ramón [nombre real de Caso
omiso]”. Una canción grande pero corta que confirma el refrán “lo bueno si
breve, dos veces breve”. Bueno, no es así el refrán, pero dice lo mismo.
Fue muy emocionante para mí lo
que pasó a continuación. El cantautor Javier
Cuenca tuvo el detallazo de hacerme un regalo por el tercer aniversario de MAL8. Se preparó para esta edición una
personalísima versión de una canción mía, Sobrenatural.
La hizo completamente suya y a su manera, consiguiendo hacerme feliz. Es muy
bonito que alguien con tanto talento se aprenda y cante una creación tuya.
Desde aquí le doy mil gracias por este enorme regalo.
En realidad cada segundo del MAL8 es un regalo para mí. Llevamos
tres años confirmando que iniciativas como esta son necesarias y muy bien
acogidas por público y artistas. Pero esto sólo está empezando. Una de las
cosas más bonitas que suceden por aquí es que vengan a traernos su grandísima
ilusión y energía artistas ya maduros que aman la canción de autor aunque no se
hayan dedicado a esto para ganarse la vida. Son los que más dan a cambio de
nada, ya que su ambición es emocional, la única que realmente vale la pena. Es
el caso del siguiente participante, Juan
Antonio Ordóñez, excelente compositor que hace poco regresó a la música con
pasión adolescente, y ahora no para de componer, cantar y hacer conciertos. En
esta edición nos trajo una canción que compuso para un especial de MXV dedicado a Madrid. La canción se
titula Ocurre en Madrid: “y esto
ocurre en Madrid, que te saca a vivir, que saca de su chistera tu sueño de amor
y quimeras”. Me encanta lo que compone y cómo lo interpreta, solamente me choca
un poco algo meramente superficial que puede cambiar sin dañar su esencia:
canta exactamente igual que un cantautor al que admiramos todos, lo cual afecta
a la percepción de su apreciable trabajo. Ya le gustaría a ese cantautor al que
imita (que hizo grandes canciones, pero que ahora vive de las rentas) componer
lo que está componiendo ahora Ordóñez.
Espero que se acepte con cariño mi crítica constructiva.
Y en este momento llegó una de
las actuaciones más esperadas en cada una de nuestras ediciones, la del poeta y
genial persona en general José Miguel González,
que comenzó su intervención sorprendiéndonos con una confesión: “me suicidé hace
un año, estoy aquí de milagro”, comentario con el cual introdujo su poema Noticias de mi suicidio. El segundo y
último poema que nos recitó en esta tarde de celebración fue Caligrafía, texto en el que, entre otras
bellas cosas, “llueve en el mar de la tranquilidad”.
El siguiente fui yo mismo, Andrés Sudón, que no quería quedarme
sin participar en nuestro III aniversario. Pensando en el taller de la semana
que viene, titulado “Canciones para el pueblo”, canté una canción que hice
cuando, estudiando historia de la filosofía medieval, me di cuenta del problema
fundamental de la sociedad occidental. Por mucho que me diera cuenta, sentí que
no servía de nada que yo lo supiera si no lograba que todo el mundo lo
entendiera. De modo que hice una canción titulada No sabemos en la que intento exponer ese problema, es decir, la
hice para el mundo, para el pueblo. Aquí os dejo la letra, a ver si sirve de
algo:
Somos prisioneros de una idea
lógica, temprana y medieval.
Antes de inventar las aspirinas
creer en Dios era más popular.
Todo aquello que creemos en
secreto,
lo creamos con palabras líquidas;
no sabemos, no sabemos, no
sabemos pensar.
Somos animales indecisos, una
espora juega al ajedrez.
En la primavera de tu espiga hago
matemáticas sin red.
Meto dentro de un triángulo
equilátero
la esfera del amor universal:
no sabemos, no sabemos, no
sabemos amar.
Tiro cáscaras de interrogación
sobre mi cerebro de cristal.
Las palomas de mi facultad hablan
con la tierra en alemán.
Memorizo los esquemas con
desorden
y vivo sin saber vivir, sin más;
no sabemos, no sabemos, no
sabemos vivir.
Otra de las cosas más bonitas que
suceden en MAL8 es cuando dos
artistas confluyen y dan fruto, ya sea con una colaboración o con algo como lo
que hizo ayer Camilo: musicalizar un
soneto de Pablo Bermejo y darle la
sorpresa de cantarla. El soneto se titula Un
ojo en un triángulo encerrado. Maravillosa la letra y la música de este
soneto convertido en canción, un fruto muy fresco de este MAL8. Quizá luego en comentarios se podrá leer y escuchar la
canción en cuestión, ya que los participantes suelen enriquecer estas crónicas
sumando sus comentarios abajo.
Al siguiente participante, Pablo Ríos, lo conocimos la semana
pasada. Para introducir la canción nos contó una historia germinada el martes
pasado, cuando en el sorteo le tocó una entrada para un concierto de Lucía Díaz, al que acudió. Después
estuvieron por ahí cantando, y Lucía
le recomendó que en esta edición cantara la canción que nos cantó, Cuida su corazón.
El siguiente fue uno de nuestros
más diestros malochos, Lope Villano,
que nos trajo a esta celebración una alegre rumba titulada Desabrochando musas, muy adecuada para esta fiesta de adictos a la musedumbre.
El dúo SilNé nos trajo una canción que también tiene tres años, la
hicieron para una homenaje a Gabriel Celaya organizado por Lucini. La canción
es un texto de Celaya musicalizado por ellos, titulado Momentos felices, título muy adecuado para lo que nosotros estamos
celebrando. Este viernes actúan en “La esquina del Zorro”, en Vallecas, en la Calle
del Arroyo del Olivar, 34. Concierto recomendado encarecidamente por MAL8.
A continuación salió al escenario
de Libertad Ocho un abrumado Pablo Bermejo, por el poema que le ha
musicalizado Camilo. Para celebrar
nuestro aniversario, cantó la canción que compuso para el primer taller en el
que participó, Soledad, que es
precisamente la que ha grabado en nuestro primer disco “Consciencia, libertad, soledad y gente rara”.
Seguidamente salió a actuar la
cantautora Marta Plumilla (autora de
las fotos sepia que siempre ilustran esta crónica), acompañada por mí a la
guitarra. Cantó la canción con la que llamó poderosamente mi atención por
primera vez (nunca ha dejado desde entonces de llamar mi atención por millones
de cosas), Nariz de Payaso. No fue la
primera que cantó cuando vino al MAL8,
ya antes me había fijado en su voz de papel. Pero esa vez cantó esta canción,
que comienza diciendo “vi tu nariz de payaso cuando doblabas la esquina…”. Esa
imagen me gustó sobremanera. Ahora somos inseparables. ¡Gracias, MAL8!
La contundente y sólida Laura Castro anunció que iba a cantar
una “cancioncilla”, y nos sorprendió con una cancionaza en la que invita: “baila
descalzo sobre la arena tú”.
Para que actuáramos casi todos
los apuntados, ayer no hicimos nuestro habitual sorteo, el cual nos hubiera
hecho perdernos alguna de las últimas tres actuaciones. En la recta final
pudimos escuchar en primer lugar a don Miguel
de Paúl, que nos trajo una de sus poéticas canciones, titulada Quererte por querer.
La penúltima actuación fue la del
cantautor Carlos Rodríguez, con una
canción con historia, creo que ya la he contado: Él y Alberto Hernández (que se quedó en la lista de espera desgraciadamente)
asistieron a un concierto de Dani flaco en el que yo también estuve, al salir
quedaron en hacer cada uno una canción dedicada a una rubia que había entre el
público. La rubia del flaco es el
resultado de este taller particular entre Carlos
y Alberto Esperamos escuchar pronto
la creación del segundo.
El broche oro para esta sesión en
la que celebramos tres años de MAL8,
lo puso el maestro Alberto Alcalá,
que esa misma noche hizo un concierto en Libertad
Ocho. Una suerte que esta edición terminara con uno de los mejores
cantautores de este país. Pude ver un gran trozo su concierto, en el que constaté
una vez más la grandísima calidad de este hombre.
Con él terminó una año más de
esta iniciativa, que ya no es iniciativa, sino algo sólido que no deja de
crecer. La semana que viene comienza un nuevo año para nosotros, lo haremos con
un taller titulado “Canciones para el pueblo”, al que ya se han apuntado
catorce artistas. Si quieres participar, aquí están las instrucciones.
Gracias a Plumilla por las fotos, a Libertad Ocho por continuar apostando
por la canción de autor en estos momentos de crisis emocional, gracias, por
supuesto, a los artistas que participan por su gran generosidad y talento, y
gracias a ti por interesarte y leer esto.
Andrés Sudón.
Reconozco que, aunque hubo varios momentos especiales ayer, para mí el que más me motivó fué la versión de Sobrenatural que hizo Javier Cuenca, que acabamos acompañando todos. Fué toda una celebración. Ayer tocamos muchas palmas, hubo ritmo, bastante ritmo, sin abandonar la poesía.
ResponderEliminarPor mi parte, esta semana traje un soneto que me cedió Pablo Bermejo y que enlazo aquí, junto con el audio. Me lo pasé muy bien, ya que no me tuve que preocupar de mi problema: la letra. Como siempre, un placer participar en este evento maravilloso.
https://app.box.com/s/os1ilwvkhcroks4oketm
Un ojo en un triángulo enjaulado
Mañana, tarde y noche cada día
Contempla imperturbable mi agonía
De ciego que se sabe vigilado.
Camino por un círculo viciado
Sin perro, sin bastón, sin compañía,
No entiendo la razón que todavía
Me obliga a repetir cada pecado.
Y sin fichar y sin estar fichado
Me cuesta malvivir en la miseria
Y sin pillar pero tan bien pillado
Me crecen los enanos en la feria,
Me siento como un tonto abandonado
En medio del desierto de Siberia.
El placer fue mío al escucharte. Ahora me explico por qué me sonaban los oídos esta semana.
EliminarPues claro que acepto tu crítica! Gracias por tu sinceridad. Además como dice Serrat: “nunca es triste la verdad lo que no tiene es remedio” y, a groso modo, lo que dices es cierto. Hay quien dice que me parezco a Serrat mucho y hay quien dice que no es para tanto, pero vamos, todos en mayor o en menor grado… coincidimos. Hay palos, estilos en los que esto no supone mucho problema e incluso parece que pasa como más desapercibido, (también es que yo he tomado una referencia muy singular y “canta” mucho, je je…); fíjate en la ópera, en el flamenco, en el metal, el heavy…etc.
ResponderEliminarHe intentado e intento minimizar mi parecido, mi exactitud, o lo que sea, en lo posible, pero al final me quedo con la capacidad de emocionar y de transmitir que tengan mis canciones. Si yo no hiciese canciones no cantaría en público ni de coña. Por eso tu amistosa crítica además de aceptarla la agradezco en mucho. No me siento además cantante y compongo por purita necesidad y, actualmente estoy que no quepo en mi por atreverme a “presentarme tal cual soy, pues ya tanto me negué, derramado en el ayer, que desperté desprendido de mi piel” (Cumpliendo los cincuenta).
Un abrazo
EMOCIONANTE reunion la del MAL8 de ayer uno tra otro cada cual en su estilo ,alegraban el alma con sus versos y canciones en variopinta y excelente muestra de arte y buen hacer con pluma ,voces e instrumentos.Es una delicia tocar y compartir cada martes lo que nos sale de adentro en tan lujosa compañia.¡HASTA EL PROXIMO MARTES!
ResponderEliminar"Si tienes gran talento no seas petulante
ResponderEliminarni estés de mal talante
si tu talento está lento".
Fue uno de los consejitos que compartí. Lo saco a colación para decir que fue una preciosa tarde, muy buen talante en el ambiente, y mucho talento.
Felicidades MAL 8, me siento un privilegiado por ser parte de vosotros. Me siento partícipe de un "Ser Vivo" que, en forma de colectivo musical y poético, se reúne los martes para intercambiar experiencias y sentimientos. Yo llegué en el segundo año de vida y, desde el minuto uno he sentido el cariño de vosotros en todas y cada una de las canciones que he cantado. Y este milagro semanal se produce porque ha habido alguien que ha invertido tiempo, imaginación y amor para que este "Ser Vivo" sea lo que es hoy, un grupo de amigos ofreciendo lo mejor de nosotros mismos. Así que, GRACIAS Andrés, porque has hecho un magnífico trabajo, y que cumplas muchos más!!!
ResponderEliminarSoy Angel de Andrés
EliminarFelicidades MAL 8, me siento un privilegiado por ser parte de vosotros. Me siento partícipe de un "Ser Vivo" que, en forma de colectivo musical y poético, se reúne los martes para intercambiar experiencias y sentimientos. Yo llegué en el segundo año de vida y, desde el minuto uno he sentido el cariño de vosotros en todas y cada una de las canciones que he cantado. Y este milagro semanal se produce porque ha habido alguien que ha invertido tiempo, imaginación y amor para que este "Ser Vivo" sea lo que es hoy, un grupo de amigos ofreciendo lo mejor de nosotros mismos. Así que, GRACIAS Andrés, porque has hecho un magnífico trabajo, y que cumplas muchos más!!!
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