No
pretendemos batir ningún record, solamente buscamos disfrutar al máximo de lo
que tenemos, pero nunca he presenciado un espectáculo que, en algo más de ciento
veinte minutos, contenga a más de veinte cantautores y poetas (valga la cópula “y” para todos los
casos) de tanta calidad, ilusión y fuerza. La ilusión quizá sea la clave más importante
para que el MAL8 (Micro Abierto Libertad 8) sea un sueño
que se hace realidad, que es realidad. Aquí podemos venir a cantar, a contar, a
recitar nuestras cositas, esas que son tan grandes y tan frágiles. Cada martes vivimos
una experiencia vibrante, compleja y concentrada, escuchar y ver a personas que
generosamente hacen arte para compartirlo, arte que sale de las arterias, de la
verdad de cada uno; lo que presenciamos es pornografía para el espíritu. Yo
salgo muy cachondo y con dolor de neuronas.
Hoy me
permito extenderme con la introducción a la crónica del MAL8 (47), para celebrar
que hace un año y unos días que comenzamos esta iniciativa. Lo que se intuía en
la primera crónica, es ahora una realidad sólida. De todas formas yo no
tengo la sensación de que llevemos mucho tiempo, al contrario, siento que esto
acaba de empezar, y creo que nos quedan por hacer muchas cosas. Este martes en el
MAL8 (48) celebraremos como queramos
nuestro añito, somos muy pequeños, pero es muy grande ser un ser nacido con
todos a la vez.
Así
pues, me dispongo a relataros por encima y subjetivamente lo sucedido en el
pasado MAL8 (47), lo mejor es
asistir, os lo recomiendo. El espectáculo comenzó con mi actuación, Andrés Sudón, porque cada martes tengo
el primer puesto ya que nadie lo quiere, aun siendo el mejor, la gente ha hecho
hueco y la canción entra muy bien. Canté Habrá
que vivir, porque en el último concierto que hice en Libertad 8 la disfrute mucho y quería repetir. Fue mejor aun que en
el concierto, ya que estaba solamente concentrado en esa canción.
Después
de un servidor salió a escena nuestro nuevo amigo Dani Cabrera, que jocosamente presentó su canción No te voy a engañar, a lo que añadió un “por
ahora” entre paréntesis. La canción transcurrió muy country mientras Manu mandaba callar al respetable. Ahora
os cuento, pero Manu Clavijo hizo
una cosa maravillosa en este MAL8.
Siguió
la tarde con poesía. La chica metáfora
salió al escenario en una tarde en la que en la calle había una gran manifestación
contra los recortes en educación. Nos dijo que es profesora, y que no estaba manifestándose,
pero traía un poema titulado El futuro es nuestra tiza en el que se
manifiesta a favor de los manifestantes. Luego nos leyó un poema “mas Chica metáfora”.
Después de actuar, y en mi ausencia, Chica
metáfora dejó sobre mi mesa, para el sorteo, un clip-bicicleta tan bonito
que creí que era para mí…
Ahora
viene lo de Manu. Cuando sale Manu Clavijo al escenario nunca se sabe
que instrumento va a usar, ya que domina los tres que estaban a su alcance. Usó
el cuarto, con el que no estábamos contando, la voz. Bueno, uso otros
instrumentos extrasensoriales, pero la canción, El ciego, el sordo, fue a capela. A primera hora de la tarde
vivimos el momento más destacable de este MAL8
(47). La canción salió de todo su cuerpo, con palabras poco más puedo
ilustrar.
A continuación
salió el primer nuevo participante de la tarde, Liauv, que cantó una versión en castellano de una canción de Leonard Cohen y otra de la cual no
sabemos el nombre.
En este
año de MAL8 he vivido muchas cosas
importantes para mí, una de ellas es haber conocido a Pedro Pastor, cuando tocó por primera vez tenia dieciséis añitos,
era un prometedor vástago de cantautor al que hemos visto evolucionar
considerablemente. Ahora tiene diecisiete y yo le veo igual, o mejor, que
muchos que rondan los veinticinco. Lo de Pedro
ha sido como uno de esos amores a primera vista que cada día confirman más la
realidad de ese amor. Pedro Pastor hace
cosas como integrar el hip-hop en la canción de autor con gran naturalidad.
Este pasado, Pedro martes invito al
escenario a otro cantautor joven y genial, que también integra perfectamente el
hip-hop a la canción de autor, Dani Fernán.
Con el cantó la canción No te lo crees ni
tú.
Del mismo
modo, acabada la cena, tomo el cáliz… Es una broma. Del mismo modo, Dani Fernán invitó a Pedro Pastor a cantar su canción Humo, en la que fluye el hi-hop entre
otras muchas cosas que ofrece Dani
con su música, con su excelente guitarra y su sonora voz, con las que hace geniales
canciones afectadas y buscadoras de luz. Otro hallazgo importante.
¡(Leer
muy rápido) Juan Luis Moreno leyó un
cuento de un minuto!
A continuación
otra nueva participante, la cantautora María
Barnuevo, una dama bohemia que nos cantó dos de sus canciones, la primera
titulada La silla del rincón,
dedicada a Madrid, sobre todo a sus pasos de cebra. La segunda se titula Primavera añil, y comienza diciendo “quiero
ser de fibra óptica”. Me gusta su serio surrealismo, ojala venga mucho al MAL8.
A pesar
de que solamente llevamos un año, hacía siglos que no venían Factótum Madrid, el dúo de hermanos que
tanto nos dieron en la primera época del MAL8.
Siguen en su línea, siendo unos cracs de la canción de humor inteligente,
innovando y apoyados en los clásicos. Si no he apuntado mal, la canción que nos
cantaron se titula Suposiciones. Un
placer escucharles de nuevo, se les echa de menos.
El
siguiente participante fue mi querido Fla
Cantares, una amante de la canción de autor que hace versiones de sus
artistas preferidos. En esta ocasión nos canto un tema de Malacabeza. A Fla le conocí
en otro sitio, pero me encanta que venga a MAL8,
es una de esas personas que valora adecuadamente lo que se cuece por aquí. Le
mando un abrazo grande.
Ya hora
viene un momentazo, algo que Hace de MAL8
algo útil, algo práctico y eficiente: a continuación vimos la consagración del
cantautor Pablo Bermejo. Pablo ha venido varias veces y ha hecho
uso del escenario hasta calibrar su puesta en escena con precisión, no en vano es
arquitecto. Acompañado por el maravilloso violín de Manu Clavijo, nos canto a la perfección y con gran belleza La sonrisa que olvidaste en un rincón, introduciéndola
con la idea de que “una decepción es siempre una ilusión puesta a prueba”. Es
cierto, Pablo, hemos de estar dispuestos
a las decepciones si tenemos sueños. Gran lección.
A la
siguiente participante no la conocía, a pesar de que ya ha estado en MAL8, ya que fue la vez que yo no pude
presentar y lo hizo por mí Andrea Mazas.
Hablo de Isabel Penalba, una
preciosa cantautora que nos cantó dos canciones de su repertorio con su dulce
voz y su pose pop. Espero que no tarde tanto en volver a venir.
Otro
que hacía mucho que no veíamos por el escenario del MAL8 es Fran Fernández, que
vino a cantarnos una nueva canción de la que no dijo el título. Mi guitarra
echaba mucho de menos las cositas que le hace, y vimos a un Fran Fernández tranquilo y risueño,
como siempre, al que echábamos de menos.
El
siguiente nuevo participante y el MAL8
han sentido el flechazo certero e inmediato. Borja Flou, que llegó tarde porque no sabía a dónde iba
exactamente, disfrutó infinito de lo que estaba viendo en el escenario de Libertad 8, y se animó el triple cuando
vio que en la sala estaba su amigo Dani Fernán,
con el que subió al escenario para improvisar dos canciones que dicen mucho, y
de forma muy atractiva, haciendo rap a ritmo de reggae. También espero que
vuelva muchas veces.
La
siguiente intervención fue la de nuestra poeta Gadea Ramos, que nos leyó dos poemas gadearamosianos. El primero lo
introdujo diciendo que “hay poemas que engrandecen el alma, este no es uno de
ellos”. El segundo poema que leyó “tiene muy mala hostia, va mucho conmigo”,
dijo. Y por muy mala hostia y muy no-engrandece-el-alma, Gadea nos metió en su poemas y nos habló con franqueza, con
complicidad y con rocanrol. Este sabado 2 de junio a las 19.00 h. podremos ver el recital que Gadea ha organizado en Libertad 8 junto a otros poetas, pincha aqui.
Ay, la
siguiente participante, Marta Plumilla,
hizo un interesante viaje en el tiempo, rescatando una canción antigua, Lista, pero con errores en la pagina.
Digo que es antigua teniendo en cuenta la velocidad de composición de esta
rubia ingrávida y sutil, como decía Machado.
Lo
siguiente fue un temazo en toda regla. Iovis
vino sin su flauta, pero con un ejército de herramientas para la música y la
belleza. Nos cantó una canción de amor brutal en la que no sé si había un mar.
La penúltima
actuación fue la del gran Iñigo Coppel,
erudito de lo que ama y amante de lo que hace. Coppel nos cantó, acompañado por el violín de Manu Clavijo el fruto de una de sus investigaciones, El Mato el silencio en las calles de Madrid", de Sabino Mendes. Lo mejor es
que sabe hacer llegar todo lo que canta, lo hace desde el convencimiento y el
placer. Otra de las cosas grandes de este año es Iñigo Coppel y su guitarra voladora. Me quito el sombreo y se lo
pongo a él.
La sesión
terminó arriba, con alegría, gracias a Petete
y la band, ilustres músicos dándonos caña para terminar una edición llena
de cosas para recordar.
Me
acabo de encender un cigarro, porque estoy a punto de terminar esto y
publicarlo. Es muy emocionante saber que esto es leído por personas que me
saben (aunque no me conozcan). Este martes, mañana para los amigos, celebramos
un año de Micro Abierto Libertad 8,
he escrito esta crónica con una ilusión de cumpleaños. ¡Ha sido un placer!
Gracias a Carlos y a Marta Plumilla por las fotos, son muy
importantes, imprescindibles. Gracias a todos por todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario