Comienzo esta crónica con la
ilusión de que ya ha comenzado la campaña de mecenazgo (lo que en inglés
sería “crowdfunding”) para editar nuestro primer disco, “Consciencia, libertad, soledad y gente rara”, nombres de los
primeros cuatro talleres que hicimos. Durará noventa días en los que
compartiremos en las redes sociales la página de campaña para llegar al mayor
número de personas posible. Es importante que se sepa que el disco sólo se
comercializará en esta campaña, después no será fácil conseguirlo, ya que las
copias que obtendrán los artistas son para que hagan con ellas lo que deseen,
no necesariamente venderlas, y haremos sólo las justas. En estos tres meses tendremos
que hacer todas las ventas posibles. Por suerte somos muchas las personas
vinculadas al MAL8 (Micro Abierto Libertad Ocho), y entre
todos debemos sacar este disco adelante, de ello depende que hagamos los
siguientes.
Y, hablando de los siguientes
discos, dentro de dos semanas, el martes
15 de Abril celebraremos un nuevo taller titulado “Dios”, al que ya nos hemos apuntado muchos de nosotros (aunque
algunos no hayamos compuesto nuestra canción todavía…). Si no te has apuntado
todavía, hazlo escribiendo a microabiertol8@gmail.com
con el asunto “Taller Dios”. Ya lo he contado, pero os recuerdo que el nombre
del taller es el que es pensando en la Semana Santa que se acerca con su fervor
y sus vacaciones.
Pero para los artistas no hay
vacaciones ni rutinas, nosotros estamos siempre alerta, creando y
experimentando, compartiendo nuestra obra, como hicimos este pasado martes en
el MAL8 (141), en el que
participaron veinte cantautores y una poeta, Olivia Tomé, quien comenzó esta sesión. “La frívola sigue adelante en busca de un
nuevo lugar”, comenzó diciendo. Y para ir despidiéndose del lugar al que llegó
antes, nos interpretó uno de los fragmentos de su “Frívola fragmentada”, en concreto el titulado Tic-tac. Que Olivia
comience la sesión, marca una buena pauta, pues, como ya he dicho cientos de
veces, Olivia sabe dar verdad en
escena.
Me ha costado darme cuenta de lo
buenísimo que es Camilo, el
siguiente en escena, al menos de lo que me gusta lo que hace. La semana pasada íbamos
en el coche de María Barnuevo camino
del concierto de Alberto Alcalá en
Galileo, y nos puso el disco de camino. Este martes le compré uno (cuesta un
euro, pero vale mucho) y lo he estado escuchando con deleite. Os animo a que
hagáis lo mismo. El disco es una maqueta, pero a pesar de no tener un sonido
perfecto y ser sólo guitarra y voz, las canciones son firmes y bellas. A él le
animo a que se embarque en hacer un discazo, tiene material para ello. Este
martes nos cantó una canción titulada Nadie
como yo, un tema con gran personalidad y complicidad dedicado explícitamente
a una compañera de trabajo. Quizá la encontremos en su nuevo disco…
Nuestro querido Javi Delgado pudo venir a visitarnos
este martes. Con el buen pulso adquirido en nuestro escenario, ya como un
profesional, nos cantó Mi estrella polar,
que “de noche ha vencido la oscuridad para verme llegar”. Es un orgullo para mí
ver a personas como él vencer sus miedos escénicos, además así podemos ver lo
bien hechas que están sus canciones.
Juan Antonio Ordóñez nos deleitó en este MAL8 (141) con una sabia canción, Todo hombre, cuya letra no se sabía muy bien, y tuvo que quedarse
pensativo en algún momento. A mí me gustó tanto, que le he pedido que me la
mande para ponerla aquí:
Todo hombre lleva un sueño
en las tripas cosido,
una sombra le persigue
y le alcanza un destino;
una pena que le embarga
y un sueldo que no alcanza
a colmarle de alegría,
de perpetua esperanza.
Todo hombre lleva un muerto
al que habla al oído,
una historia y un recuerdo
que derrota al olvido;
un amor que surte fuerzas
para andar el camino.
Todo hombre lleva un niño
en el alma escondido.
Todo hombre tiene un nombre que no escogió
y la vida en los latidos del corazón.
Todo hombre tiene un tiempo del que heredó
cada día, malo o bueno, que vivió.
Todo hombre tiene un miedo
y busca una respuesta,
en lo grande, en lo pequeño
tal vez halle una puerta;
sea ancha, sea estrecha
la querrá siempre abierta;
peleará por su existencia
como vida de guerra.
Todo hombre mira al mundo
en sus ojos distinto.
Es errante vagabundo
en conocerse a sí mismo.
En su alma alza un vuelo
que apunta hacia otro rumbo
y, aunque sus pies besen suelo,
sus ojos son trotamundos.
Juan Carlos Cristiano nos trajo esta tarde una canción muy explícita, Canción de desamor, en la que declara "de Gran Vía a Princesa fui inventándome una letra que rimara con tristeza". Poco a poco vamos conociendo a este nuevo malocho.
El siguiente fue Raúl Ródenas, un auténtico roquero de voz desgarrada y letras lisérgicas. En esta ocasión nos cantó Mi alma, en la que hace una descripción de su mundo interior con bella oscuridad y sin tapujos. Le invito a que la ponga en comentarios, para los curiosos voraces.
El siguiente fue Raúl Ródenas, un auténtico roquero de voz desgarrada y letras lisérgicas. En esta ocasión nos cantó Mi alma, en la que hace una descripción de su mundo interior con bella oscuridad y sin tapujos. Le invito a que la ponga en comentarios, para los curiosos voraces.
Mi amigo Fernándo Álvarez, uno de mis cantautores favoritos, nos cantó una
canción muy interesante, Probables
imposibles, en la que rapeando suavemente hace una reflexión que muchos
amorosos nos hemos planteado: ¿cómo es posible que haya una media naranja para
cada uno? Esa idea circula por nuestras estrechas mentes causando gran frustración,
mucha gente piensa que ha conocido al hombre o a la mujer de su vida y que
después de esa persona ya no hay nada más. El amor que hay en el mundo para
nosotros, es infinito, y eso es lo que aclara Fernando Álvarez de forma sarcástica y divertida, por medio de una
historia muy bien hilada.
A colación de esto, comenzó María Barnuevo su intervención
asegurando que “somos una naranja entera hasta que encontramos el amor y nos
partimos a la mitad”. En su canción (mira que le pregunté el título al terminar
la sesión, y no lo apunté…) lanza severos reproches, siempre con la dulzura que
conocemos de ella, al receptor de su canción: “mi amor fue jugoso (…) y tú lo
convertiste en un bonsái que cuidabas en tus ratos libres”, y le advierte de la
onda expansiva de su dolor, “te están mirando mi madre y mi hija”. Acompañada
por el violín y los coros de Manu
Clavijo, cantó muy bellamente esta habanera en la que sus queridas plantas
tienen gran protagonismo.
Y precisamente Manu Clavijo fue el siguiente en escena,
a quien admiramos por todas sus facetas, ya que es un grande en todas ellas. La
de cantautor es mi favorita, ya que su mundo literario y melódico son únicos e
intransferibles, tiene su propio sello. Nos cantó un particular vals titulado Me desenero, en el que se desenera, se
desfebrera, y así hasta desmayarse. Si queréis conocer ese mundo único de Manu, el próximo martes, después del MAL8 (142), le podremos ver en
concierto en Libertad Ocho. Es más,
lo haremos y nos desmayaremos.
Llegados a la mitad del MAL8 (141), llegó el momento de conocer
a los nuevos participantes, en este caso a las nuevas participantes. La primera
de ellas fue Damdara, que hizo una
emotiva intervención cantando una canción titulada Enseñando al mundo qué es felicidad, en la que trata el tema del
autismo con evidente implicación.
La segunda fue la
francesa-murciana Maskarine, que se
estrenó en el MAL8 y en el escenario
de Libertad Ocho con una canción
titulada On se déçoit, cuya
traducción es Nos decepcionamos. Cosa
que no nos pasó con ella.
Miquel López volvió al tema propuesto por Fernando Álvarez, y nos cantó una canción, Sol de melocotón, en la que enumera las casualidades que llevaron a
que él conociera a una mujer mexicana de la que se enamoró como si fuera su
media naranja. Digo que también podría titularse Sol de durazno, que es como llaman allá a los melocotones. A pesar
de que anunció que estaba algo nervioso, la canción le salió de maravilla.
De vez en cuando nos visita Donato, un ser excepcional, un
percusionista profesional que también es cantautor, profesor y vividor. Con su
bell (un instrumento australiano de reciente invención) hizo un mix del Concierto de Aranjuez y del Asturias, dejándonos a todos
boquiabiertos.
Miguel de Paúl está inspirado, y no hace más que traernos nuevas
canciones, cada vez más bonitas y más bien hechas. Esta vez nos sorprendió con Cruzando el río, canción que nos sacó
unas palmas al atento público del MAL8.
Nuestros queridos Silvia y René, es decir SilNé,
fueron los siguientes. Introdujeron su intervención contándonos la historia de
cómo se conocieron. A Silvia le hablaron de René, le contaron que era un gran poeta y un músico de jazz
estupendo. Cuando por fin se conocieron, ella le preguntó a él que si estaba
componiendo algo, y cuál fue su sorpresa cuando él le dijo que estaba
componiendo una canción a las papeleras de Madrid. Muy divertido. Y esa fue la
canción que nos cantaron, Papeleras. Nunca
dejarán de sorprendernos.
Antes, hablando de la campañade mecenazgo (a ver quién inventa una expresión más corta que signifique lo
mismo que crowdfunding en castellano) de nuestro primer disco, decíamos que es
fundamental que salga adelante para poder hacer los siguientes. El siguiente será
“Palabras salvadas”, con canciones
del taller con ese nombre, en el que cada uno escogió un título de una lista de
palabras en extinción. Para ese taller Lucía
Díaz, la siguiente participante, escogió la palabra Hojarasca, canción que nos cantó este pasado martes. Es una de las
canciones más bonitas de Lucía, creo
que es la que más me gusta del repertorio que yo le conozco.
El extraordinario Caso Omiso también trajo una canción de
uno de nuestros talleres, Él, en la
que habla de alguien que no sabemos bien quién es; podría ser su hermano
gemelo, que no es una invención literaria, como yo pensaba, porque el otro día
les vi juntos en una foto: “que por qué me pongo así, te has colado en el baño
(…), nunca me han gustado los listos ni los santos, ¡vete a la mierda!”, canta
en esta canción con el sello propio de Caso
Omiso.
Al igual que SilNé, Las dos en punto
también nos desvelaron los entresijos de la canción que interpretaron, Perdí mi libertad. Mila, la cantante del grupo, nos contó que Rafa, compositor del grupo, la compuso mientras fregaba los platos.
Yo, como compositor, lo entiendo, no hay nada como hacer algo banal para
encontrarse por dentro con algo trascendental. Maravillosa canción, por cierto.
La penúltima actuación fue la de
Su Majestad Marta Plumilla, a la que
tenemos que felicitar por haber llegado a buen término con su cademe (campaña
de mecenazgo –intento inventar una expresión plausible y castellana…-). Nos
cantó un tema incluido en su disco “Sonata
(…) interior”, una de mis favoritas, Pez
cósmico, en la que habla de los manidos usos y costumbres del
enamoramiento, denostándolos y dándole al amor la dimensión que se merece: “hoy
quiero ser tan sólo un pez dispuesto a respirar, sin conocer ni obedecer las
leyes de la humanidad, tan sólo un pez”, porque asegura: “no me interesa poseer
tu cuerpo ni tu edad”, sólo quiere ser “esa canción alegre y divertida (…),
desabrochar tu piel mirando el mar sin la mirilla”. Plumilla es todo un caso de evolución, tanto humana como musical.
Como es habitual, la sesión la
terminó con quien después hizo un concierto en el escenario de Libertad Ocho, nuestro querido Juanlu Mora. Y no fue un concierto
cualquiera, era el primero que daba en Libertad
Ocho, y también el primero que hacía en cuatro años. Había una gran
expectación, ya que todo el que le conoce le adora, y la sala estaba llena para
ver un concierto que no decepcionó a las personas que sólo le conocían por
leerle y admirarle como poeta. No voy a entrar en los pormenores del concierto,
por mucho que me apetezca, pero quería agradecerle los agradecimientos que hizo
al MAL8. Es muy bonito escuchar que
alguien ha decidido seguir adelante con la música por haber participado y
bebido de nuestras mieles, mieles que él mismo produce. Desde aquí le doy la enhorabuena
y le auguro un futuro lleno de canciones.
Y así fue el MAL8 (141). Antes de despedirme quería comentaros que este sábado actúa
en Libertad Ocho, fuera de programa,
Juan Fernández Fernandez, un
cantautor que por trabajo no puede venir los martes, pero que yo recomiendo
muchísimo. Le conocemos por el proyecto que tiene en común con Clavijo (al que veremos en solitario
este martes 8 de Abril), y merece la
pena escuchar su obra suya y conocerle a él en exclusiva un poco más. Ahí queda
eso. Nosotros nos vemos el próximo martes a las siete en punto donde siempre.
Ah, otra cosa, las fotos de esta crónica las he robado en el blog de El Pepis, un nuevo malocho que ha
tenido la cortesía de fotografiarnos y subir sus bonitas fotos para que nos
veamos. Espero que no le importe el hurto. Gracias a todos por todo.
Andrés Sudón
Ante todo y tras darle las gracias a Andrés por su comentario, he de decir que, quizá gracias a que nos puso las pilas desde el principio, el resultado de este micro me encantó. No todo el mundo me gusta igual, pero en esta ocasión el nivel me pareció muy bueno. Nadie se quedó atrás.
ResponderEliminarSobre mi canción, debo indicar que es una letra irónica que se refiere al típico pelota de oficina (inspirada en Les Bonbons, de Brell, que recomiendo). Mi canción: http://kamilospsonria.blogspot.com.es/2011/08/nadie-como-yo-011.html (a veces me gusta jugar con la producción casera). Un abrazo a todos.