jueves, 11 de abril de 2013

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (92). 09/04/13


“¡Oremos!”, comienzo diciendo cada sesión de MAL8 (Micro Abierto Libertad 8), emulando a un sacerdote en una ceremonia religiosa. Lejos de ser un simple chiste, comenzamos cada sesión llenos de solemnidad y expectación, mucha más que la que he visto algunas veces en otros templos. No en vano al Libertad 8 se le llama “El templo de la canción de autor”. Y aquí venimos los fieles (a nosotros mismos) a rezar las oraciones que nadie nos enseñó, oraciones reales que atraen o repelen, según el caso, acontecimientos interiores, quizá espirituales. La cuestión es que los que acudimos cada martes no venimos a ver un escaparate de artistas, venimos a una ceremonia laica pero espiritual. Cuando digo “oremos” la gente se ríe, yo me río, también porque a veces reímos cuando algo es real.

El MAL8 (92) comenzó con media hora de adelanto, en realidad con un cuarto de hora de adelanto, y terminó media hora antes. Tuvimos menos tiempo del habitual, pero, aún así, actuaron diecisiete personas, entre ellas siete nuevos participantes, a los que agradezco que cantaran una sola canción y fueran comedidos leyendo sus poemas para dejar espacio a los apuntados en la lista de espera. He de decir que esta edición fue aún más magnífica que las anteriores. Tanto los nuevos participantes como los habituales, son muy buenos y lo dan todo. El nivel es muy alto, a pesar de que solamente exijamos, como público, autenticidad en los artistas.

El primer participante fue Álvaro Laguna, un cantautor que asistió a la primera edición de MAL8 y del que aún seguimos disfrutando. Nos preguntó antes de cantar que qué queríamos, que qué necesitábamos en este momento para comenzar la tarde. Le pedimos alegría, y nos fue dada con la canción Corsé, la cual coreamos muchos de los que estábamos allí.

Álvaro Laguna

Con esta primavera en el ambiente, salió el siguiente participante, Manu Clavijo, que nos cantó la canción que fue “su bandera hace años” y de la que no sabe “qué pensar en este momento”. Se titula Síndrome, un bonito bolero en el que se define y lamenta, “Ya que no puedo estar vivo / que algo me ayude a moverme”. Opino que las canciones que nos definen han de dejar de gustarnos pasado un tiempo, no sea que caigamos en el estatismo y la autocomplacencia. No es el caso de Manu Clavijo, un cantautor que crece ante nuestros ojos en todos los aspectos.

Manu Clavijo

El siguiente participante, Vadik, es un auténtico trovador, un lírico guitarrista que trata las melodías y los textos con gran elegancia latina. Nos cantó El inventario, un repaso de su vida, una mirada al futuro, una queja en la que reza “tengo moratones en todos los cuadernos”.

Vadik

Miguel de Paúl nos trajo una nueva canción titulada La canción de la jodía Marta, en la que nos cuenta la historia de esta tal Marta, con su particular estilo roquero de los cincuenta, siempre acompañado por su poluta guitarra eléctrica, cuyo sonido es inconfundible.

Miguel de Paul

Llegó el momento de escuchar a la primera poeta de la tarde, que fue Oropéndola, una muchacha mexicana concienciada con las circunstancias de su país y de su frontera con el Imperio. Su propósito es “dar voz a los invisibles”, en este caso a las mujeres que viajan en el “tren de la bestia”, un medio para cruzar al otro lado, donde siete de cada diez mujeres son violadas. Casi es un pago por poder pasar, y mujeres inocentes se dejan hacer para alejarse de algo peor. También habló de “las patronas”, mujeres pobres que atienden a estas viajeras dándoles asilo y comida cuando es necesario. Una intervención de lo más sobrecogedora.

Oropéndola

Más poesía a continuación con el magnífico poeta José Miguel González, que comenzó su intervención citando a Catulo para, posteriormente, recitarnos varios poemas de amor y de odio. Comenzó con un delicioso poema que escribió en Tánger a los veinte años “cegado por el humo”. El segundo poema tiene el nombre de Colliure, el pueblo donde está enterrado el maestro Machado. Después nos regaló un par de poemas de sendos autores. El primero de Lorca, Soneto de la queja, y después un poema de una poeta polaca que cuenta los minutos previos a un atentado en un bar. Aunque se pasó un pelín de tiempo, nos encantó su actuación.

José Miguel González

El siguiente fue un nuevo participante, Alfonso Copé, hermano de nuestro amigo Manolo Copé. Alfonso es un gran cantautor, toca de maravilla la guitarra y dice cosas muy interesantes. Destacar también la energía con que nos cantó su canción.

Alfonso Copé

Otra nueva participante fue Lara Rosales, que vino acompañada de su guitarrista. Esta bella cantante y compositora nos cantó la primera canción que compuso, finally gone, dedicada a su abuela e incluida en su álbum “I´m here”. Muy bonita su voz rasgada.

Lara Rosales y su guitarrista

Seguimos con nuevos participantes (que, como dije al principio, tuvieron el detalle de cantar cada uno una sola canción para diera tiempo a más personas a actuar). El siguiente fue Pablo Sánchez, que junto a la voz y el violín de Clavijo cantó una canción muy oscura y muy rica, para mi gusto. Esta actuación fue de mis favoritas.

Clavijo y Pablo Sánchez

Otro nuevo participante, que también me encantó, fue Juan García, que acompañado por las guitarras de Lea (del que hablaremos a continuación) y de Pablo Sánchez, cantó la canción Límites azules. No sé cómo decirlo, una locura, no me podía creer lo que estaba pasando, estos nuevos participantes nos trajeron muy buen material al MAL8 (92). Preciosa la voz de Juan García.

Lea, Pablo Sánchez y Juan García

El siguiente, también nuevo participante, fue Lea, al que acabábamos de ver tocando la guitarra. Nos cantó una canción nueva titulada Primer paso. Una alegría conocer en persona a este magnífico cancionista (por ejemplo).

Lea

Pero aquí no terminaron los nuevos participantes, nos faltaba por conocer a Anita Antón¸ una dulce cantautora que no cantó “salgo de mí, me rehago, doy vueltas en el torno, soy tan de barro”. Muy bien moldeada esta artista amiga de Adán y Eva.

Anita Antón

Tras conocer a todos estos nuevos participantes, llegamos gasta el final con algunos de los más representativos malochos. En primer lugar Marta Plumilla, que cantó un divertidísima canción, acompañada por Manu Clavijo al globo, en la que nos describe a su muñeco hinchable, “igual a ti”, con “una fotocopia de tus ojos en la cara” y una “radiografía de tus pulmones en el pecho”, entre otras cosas divertidísimas. Nunca dejará de sorprendernos.

Marta Plumilla

Diego Mattarucco nos trajo la segunda parte de lo que nos mostró la semana pasada con gran éxito. En este caso fueron Dudas cacofónicas, que comenzó leyendo hasta que soltó el papel violentamente, se levantó y soltó una ráfaga de aliteraciones cual ametralladora. Magnífico el maestro Mattarucco.

Diego Mattarucco

La poeta Olivia Tomé nos mostró su trabajo Historia de una frívola fragmentada ya más elaborado, preparado para hacerlo en una función exclusiva. Mattarucco la acompañó al piano mientras ella recitaba de memoria y con actitud dramática. Cuando un poeta es actor, como en este caso, nos llega mejor su obra. Muy bien.

Olivia Tomé

El penúltimo fue nuestro admirado Lope Villano, que nos cantó Extrarradio, una canción para nostálgicos en la que habla de su adolescencia y hace una elaborada postal de las cosas del momento, su relación con las niñas, las cintas robadas en Simago, los doce goles de Malta… excelente el trabajo de este cantautor.

Lope Villano

Por último y tras el habitual sorteo de regalos aportados por los participantes, pudimos escuchar a Willy Tornado cantarnos su canción A once mil quilómetros de ti, cuya energía dejó arriba el final del MAL8 (92).

Por primera vez despedí el MAL8 diciendo “podéis ir en paz”. Supongo que eso lo dicen en las misas porque tras la ceremonia se ha hecho cierta limpieza interior, de modo que me parece adecuado despedir así. Gracias a Marta por las fotos, a los participantes por participar con saña y a vosotros por leer, comentar y compartir.

Andrés Sudón presentando el MAL8 (92)

Andrés Sudón

6 comentarios:

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  2. MUCHAS gracias por tan buenas crónicas!!

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    1. Es un placer. No sería nada sin el talento que regaláis los artistas de los que se habla en nuestra crónicas. Por ello, gracias, Diego.

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  3. Saludos Malocheros.. siempre los leo.. Briyi.-

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  4. Un gozo el ambiente de respeto y el calorcillo de la gente que sin conocerme de nada parecía todo lo contrario...bueno, tampoco así, si no me hubiera llevado más de un corte de mangas...XD. Una lástima las prisas y no poder cervecear un ratico, ni en el micro abierto ni el bolo de mi hermanico Manolo y de la celebérrima Inés Saavedra. La próxima que pase por Madrid no falto, al menos pa poner orejas y emoción.

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  5. Gracias por el silencio y la escucha, y ahora, agradezco tus palabras describiéndome. Un placer compartirlo con Ustedes.

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