lunes, 18 de abril de 2016

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (247). 12 /04/16

Corre el año dos mil dieciséis a toda velocidad, de pronto estamos en Abril, terminando Abril, recordando Abril. Y de este Abril recordaremos, entre otras muchas cosas, aquella tarde de lluvia copiosa en la que estrenamos el nuevo equipo de sonido de Libertad Ocho. Ya es un regalo en sí mismo que cada martes podamos juntarnos en el MAL8 (Micro Abierto Libertad Ocho), pero este pasado martes 12 de Abril fue como si hubieran llegado Los Reyes Magos. Lo primero que vi al entrar fueron las cajas vacía apiladas en la puerta, en ellas impresa una famosa y prestigiosa marca de productos audiovisuales, después vi el viejo equipo desmontado, y al entrar en la sala los flamantes nuevos altavoces. Se me saltaban las lágrimas: dos monitores independientes, tres cajas estratégicamente distribuidas, esa mesa de mezclas, ese ecualizador... Se me saltan las lágrimas ahora mismo mientras lo recuerdo. Después de todo lo que nos hemos quejado por el sonido en este Templo de la Canción de Autor, ahora mismo tiene el mejor sonido de las pequeñas salas de Madrid, que es lo que le corresponde a un lugar de este prestigio. La cuestión es que el prestigio no paga las facturas, y este nuevo equipo, casi literalmente, lo han traído los Reyes Magos. El mes pasado se celebraron tres conciertos que recaudaron los fondos necesarios para que ahora tengamos el mejor sonido de Madrid. Desde aquí agradezco personalmente a Marwan, Fran Fernández, Alejandro Martínez, Marino, Rash, Funanbulista, María rozlén, Gastelo y Rebeca Jiménez su trabajo como Reyes Magos. Los participantes de MAL8 (247) tuvimos el honor de estrenarlo este pasado martes, yo mismo estuve aprendiendo a manejarlo durante la sesión, lo que impidió que le prestase a Fernando Bárcena, el primero de la noche, la atención que merece. Mientras me hacía con los mandos de la nueva maquinaria, el dejaba en el aire versos como estos, los primeros en salir de este nuevo equipo que estamos celebrando: "(...) Hay una luna escondida que se viene un poco abajo cuando te marchas deprisa, cuando te mueres despacio (...)". Espero que en comentarios nos cuente con más detalle cómo fue esta primera actuación. Y aún no había terminado de hacerme con los botones de la mesa cuando llegó el turno de Marta Plumilla, pero a pesar de estar concentrado en cuestiones técnicas, os puedo contar qué cantó, porque conozco Eso muy bien. Eso es el título de la canción que cantó, un tema mítico, una de las mejores canciones que yo he escuchado en mi vida: "¿Con que soñó Martin Luther King la noche antes de morir?, ¿cuántas canciones buscó Edith Piaf hasta encontrar Ne me quitte pas? (...) ¿cuántas cometas voló el Ché en playas desiertas en su niñez? (...), pero la incógnita que hoy más me duele es no saber hasta dónde me quieres? (...)". Estoy seguro de que le respondieron que hasta el infinito, pero esa duda quedó convertida en esta belleza que puedes escuachar aquí. Yo no la pude escuchar el pasado martes como me gusta escucharla, siempre diferente, porque estaba liado con el nuevo equipo... Al siguiente participante no le pude negar toda mi atención, ya que se trataba de mí mismo, Andrés Sudón. He de admitir que no me presté total atención, mientras cantaba estaba deseando ir a la cabina a bajar el volumen de los monitores. Canté El desierto de espejos, de la que ya he hablado en otras crónicas, una canción para aquellas personas que descubren la realidad de sus problemas y aún no saben cómo abandonar la confortable tristeza. Aquí la dejo. Por cierto, gracias a los que ponéis en comentarios vuestras canciones, pensamientos, etcétera en comentarios. El lector de estas crónicas puede conocer el punto de vista de los artistas de lo que aquí se habla.

Tras mi actuación salté como una gacela thompsom hasta la cabina de sonido mientras Alessandro Brando se disponía a hacer una brillante versión de un conocido tema de Bowie. ¡Cómo describir la energía con interpretó la canción? En la cabina bajé los monitores, puse el micro del pianista e intenté equilibrar los volúmenes del piano al natural con la voz. Me resultó imposible. Luego me di cuenta de lo que estaba sucediendo y salí estupefacto a la sala absorbido por la energía que Alessandro Brando nos ha estado negando últimamente. De pronto empecé a pensar que el equipo nuevo estaba provocando una especie de limpieza espiritual, pero la realidad es que Alessandro se desmelenó con integral elegancia, quizá como presagio de algo nuevo. Y quien está como nuevo es Osvaldo Lindner, a quien la semana pasada enviábamos un vídeo cariñoso porque estaba convaleciente. Ya en pie vino a agradecernos ese vídeo, iniciativa de Valentín, a decirnos que se encuentra como un roble y a cantarnos un clásico de su repertorio, Volver en guitarra, una composición de Roberto Galarza que, a ritmo de chamamé, Osvaldo interpretó con una una fuerza especial: "(...) que se transforme en árbol mi alma entera, (...) bajo mi sombra descansen mis paisanos, (...), y cuando troche mi madera un carpintero, que en vez de mueble me transforme en guitarra". En un momento le salió de la voz un armónico hermosísimo, el más hermoso que yo he escuchado nuca, al cantar la palabra "ti". Puede que ciertamente hubiera una energía especial en este MAL8 (247). Además, Camilo Crespo nos recordó que somos unos privilegiados los que asistimos a estas sesiones de MAL8 con Mainstream, una dinámica canción que interpretó con soltura y gracia. Os pego la letra para entendáis a qué me refiero:

MAINSTREAM (L.C.Crespo Aguirre, 2014.01)

Si eres listo no dejarás
De estar donde todos van
A dejarse ver que para eso está
La calle principal

Es agradable ser adulado
Tan bien reconocido y tal
Sentirse bien apreciado
Justamente correspondido y tal

“Mainstream”, “mainstream”…

Hermosa tarde de paseo
Caminito de ida y vuelta y tal
Y al llegar al final
Empezar de nuevo la rueda y tal

Las señoras que controlan
Lo que pasa en el pueblo
Se saludan murmurando
Ese no estaba en el entierro

“Mainstream”, “mainstream”…

El cabo de la benemérita
El alcalde contingente
El cura al estilo berlanga
El maestro que nunca aparece

Cada día va la recia manada
Sin salirse de la vereda
Compartiendo falsas vidas 
En pura clave posturera

“Mainstream”, “mainstream”…

"El que tiene padrino se casa"
"El que se mueve no sale en la foto"
"No salgas nunca de casa sin paraguas"
"Los hombres son buenos y tontos"

"Todos los políticos son iguales"
"El que venga detrás que arre"
"Que cada palo aguante su vela"
"Las mujeres son malas e inteligentes"

"Si no te lo llevas tú, lo hará otro"
"Si quieres ser feliz desconfía de todos"

“Mainstream”, “mainstream”…

Sinceramente, yo prefiero
Mi pequeño bar y mi micro abierto
Donde todos somos grandes, todos pequeños
Donde el "mainstream" se muere de aburrimiento…


"Como es un día lluvioso, os voy a cantar una canción de lluvia", dijo Javier Cuenca para presentar su canción Trenes. Con sus características armonías, Cuenca volvió a envolvernos en imágenes acogedoras: "Trenes bajo la lluvia en noches de esas, meciendo las palabras que guarda el azar, estaciones que esperan la gris madrugada cuando aguza la espada su ojo avizor". Atento a Javier, porque amenaza con deleitarnos sin medida con ese nuevo álbum en el que está trabajando. En la siguiente actuación Valentín Nueda se hizo acompañar por Juan Fernández Fernández para recitar sendos poemas de Pablo Neruda y Juan Ramón Jiménez, lo cual dio altura y rotundidad clásica a su intervención. Y la poderosa magia de lo nuevo volvió a escena con Sergio Sanz, al que vimos transformarse en escena cantando Soy un cretino con una nueva voz, un nuevo ritmo, una nueva actitud: "tengo la boca muy seca de contarte la misma historia a todas horas, tú nunca escuchas lo que digo (...)". Muy estructuradita la canción, my pop-rock-regae, usando novedosos registros de su voz. ¿Será verdad que el equipo de sonido nuevo nos estaba ayudando a transformarnos en lo que podemos ser? La cuestión es que la novedad estaba en el aire, y si esto pasó el primer día de equipo nuevo, ¿qué delicias nos depara el futuro?

Y para novedades las que nos traen casa semana los nuevos participantes. Este pasado martes conocimos a cuatro, la primera fue Beatriz Sancho, que antes de leernos Chacra Cuatro, comentó algunas de las actuaciones anteriores, constatando que estaba integrada en lo que estaba sucediendo. En su texto hace apología del verso libre para hablar también de otros asuntos. Le invito a que compara en comentarios su texto y sus impresiones en general. Las siguientes nuevas participantes se llaman Amely Dubauchelle e Isabel San José, poetas que vinieron a conocer el mítico escenario de Libertad ocho, ya que pronto estarán en él presentando sus publicaciones. Nos leyeron un poema cada una, titulados respectivamente Herida y Nostálgico momento. Un placer conocerlas. La última nueva participante es la cantautora Ana Cruz, una joven creadora que está aprendiendo y ya se ha sometido a los rigores del escenario de Libertad Ocho, donde titubeó un poco en algunas partes de su canción, Mi valiente Guerrero. Esperamos ver su evolución en próximas ediciones.

Y a veces la novedad consiste en regresar, por ejemplo, a la adolescencia, como propuso en este MAL8 (247) Juan Fernández Fernández con su Canción adolescente. "La edad no tiene que ver con la forma de ser...", dijo para presentar esta canción en la que admite debilidades propias de esa edad que nunca se sabe cuándo termina: "Estrellas con un brillo ceniciento, tristezas que cultiva el sufrimiento, dos pétalos gemelos contra mi (...), la decepción de saber que a tu cama no iré yo, no iré yo, no iré yo...". Esa última frase se repite durante tanto tiempo como adolescente te sientas. Yo aún no he parado de repetirla desde el martes... El siguiente en escena fue Antonio Espinosa, que nos cantó El que avisa no es traidor (esto es lo que hacía en los viejos tiempos cuando en las crónicas no sabía qué decir de una actuación; cuando en Enero volví a retomarlas lo hice con el propósito de contar con honestidad lo que yo vea en las sesiones, pero Antonio me ha pedido que no le meta "tanta caña" después de cantar El que avisa no es traidor, así que abandono la causa, insistiéndole por última vez que se prepare un poco más para subir a un escenario, realmente necesita trabajar mucho para tener el nivel básico, luego habría que pulir algunos detalles más; a partir de ahora solamente transmitiré en estas crónicas su progresos, ya que parece que se ha decidido a tomar clases con un buen profesor que le va a hacer sacar lo mejor de sí). Víctor Bueno nos cantó El blues de los malos regresos, del que admitió que "ni es un blues ni habla de malos regresos": "Para no ser un un fantoche en tu vida por arreglar con cinta aislante las heridas (...), no hallé más que esta canción (...), en ningún momento hable de boda, de esos contratos abusivos que me proponías (...)". Oír hablar de "contratos abusivos" a una persona tan parecida a un famoso líder de la nueva izquierda, es estremecedor. Más allá de sus parecidos, Víctor Bueno es un tipo encantador que está últimamente trabajando mucho con sus canciones. Así como Luis Fercán, un jovencísimo cantautor que promete belleza en su trabajo, pues la materia prima que nos enseña es brillante y hermosa. Si sigue preparándose con esa ilusión puede que nos de muchas alegrías. En este MAL8 (247) nos cantó una nueva canción en la que pasa del susurro al grito diciendo versos como estos: "Siempre fuimos cargados de flores, tan cargados de vida (...), y te veré tan cargada de flores, tan inmensa de vida con tu felicidad que brindaré mi copa ante el siguiente que no te haga llorar (...)". Espero verle por aquí habitualmente, es muy emocionante ver cómo crece un artista con ganas de ser grande.

Se acercaba el final de este MAL8 (247) en el que tanta ilusión nos arrancó el hecho de estrenar el flamante nuevo equipo de sonido de Libertad Ocho, cuando llegó el turno de nuestro querido Vidanauta que nos está presentando últimamente una serie de canciones muy especiales que creo que culminan con la que nos cantó en esta ocasión: "En la vidanave soy mi comandante (...), mañana cambiaré de dimensión, hoy soy un planeta redondo (...), bailo entre dimensiones buscando sin éxito un baño de luz (...), hoy soy el sueño de un niño volando a tu cabeza voladora (...)". En todas estas canciones que nos ha mostrado en este tiempo, suceden cosas imposibles, son un derroche de imaginación en todos los aspectos: letra, música, puesta en escena, etcétera. Supongo que en el futuro veremos esto convertido en un disco o un espectáculo. Quizá en próximas ediciones vuelva con los cantos intis de su mundo real, que a mí particularmente, me emocionan. Después actuó Billy Hob, que nos cantó una canción titulada Todo va a ir bien, en la que un niño anima a su madre, víctima de maltrato, diciéndole "que ya no habrá más dolores de cabeza ni golpes sobre la mesa a la hora de dormir". Y hacía tiempo que no nos visitaba Nadia Álvarez, que nos cantó de nuevo una de las canciones con las que nos sorprendió tanto en sus primeras veces en el MAL8, Gracias a ti: "tus manos siempre tan sucias de enterrar lo que no quieres traer, tus ojos siempre tan claros alumbrando lo que nadie ve". La penúltima actuación fue la de Adrian Luna, que nos cantó una canción aún sin título que "he terminado esta tarde", según confesó. qué ricas las canciones recién hechas, calentitas: "Tenía tantas cosas en mente, que no cabía nada más (...), seré la última piedra de los besos que esparcí por la carretera". 

Y la última actuación de la tarde fue la guinda perfecta a un día lleno de novedades: la canción Rosas en el mar  de Luis Eduardo Aute "cantada al estilo Queen" por Cheng Ming y coreada por toda la sala que ya estaba exhausta de emoción. Después de este MAL8 (247) tuvimos un evento muy especial, el primer recital de Libertad Ocho de nuestro querido poeta Andreas, al que acompañamos algunos de nosotros en el vibrante recorrido que que hicimos por su contundente mundo literario. Yo disfruté como un niño introduciéndome en ese mundo lleno de verdad y de intención literaria. entre algunas palabras rebuscadas y muchos versos de medida perfecta encontramos la realidad de una persona en la que hay "un niño abrazado al verso escrito". La verdad es que fue un gran día, una deliciosa velada, toda una maratón de emociones que no tenemos problema en repetir cada semana. Nos vemos el próximo martes con la expectación de saber de qué manera alcanzaremos el nirvana esta vez (podéis ver los tweets y fotos de esta sesión en esta entrada).


Andrés Sudón.

10 comentarios:

  1. Qué bueno degustar nuevamente un momento pisado, pasado, narrado a través del tamiz de otra mente, de otra pluma. Qué bueno que juntos podamos: apuntar, si se desea, un ángulo nuevo de la escena, un matiz de la garganta que se atrevió, un sentimiento que evoca aquel que canta con versión propia nuestra propia versión...

    Os dejo parte de mi cuarto chakra 4

    CHAKRA 4

    Quise tenerlo, y lo tengo.
    Lo miro, lo contemplo,
    Y no me importaría
    Pasar de nuevo
    A otro escenario.
    Pero el miedo a la pérdida, al desagarro...
    Esa carencia de desapego integrado, domesticado,
    Qué bueno sería consustancial y definitivo,
    Como el que muda el abrigo, la piel,
    El rollo de papel higiénico gastado...
    ... Me clava a estas tablas.
    ¡No cambio de escenario!,
    Porque la raíz me ata,
    A una letra que se paga,
    A la compañía añeja, ligera y cómoda,
    Que no estorba cuando no estorba,
    Al fruto prohibido, hecho carne,
    Y que aprieta, nutre, obliga...
    Duele... despierta... cronifica...
    Cansa, enseña, impacienta, enfada,
    Señala... acusa... culpa...
    ¡Cuando crezca...!
    ¡ME DAN POR - EL - CU-LO! ...
    SIN REMEDIO,
    Así que vuelvo a darle al verso libre,
    Libre él al menos:
    Vehemente, jovial,
    conscientemente inconsciente,
    Inconstante, frugal e inmaduro,
    Fluyendo entre el instinto, la tinta,
    Y la voz del tonto poeta,
    Que TONTA MENTE libera,
    O tal vez me libra,
    De las ganas contradictorias...
    De PERTENECER ... O ESTAR SOLA.

    (O LAS ACENTÚA).

    Newtriz

    ResponderEliminar
  2. Fue maravilloso estar allí, conoceros es lo mejor que nos pudo pasar, disfrutamos mucho de cada momento que se vivió allí; de hecho, mañana día 19 si Dios quiere estaremos con vosotros de nuevo deleitándonos con tan magníficas personas.

    ResponderEliminar
  3. Maravilla de sonido Andrés, entiendo tu emoción. Me sentí bien y con ganas de cantar esa hora dormida, que me trae buenos recuerdos y ganas de descubrir exactamente por qué la hice. Hay más cosas en ella que un tiempo estrictamente íntimo: horas dormidas que nos relajan, horas tan dormidas de vida que nos duelen, horas donde se adormila la inspiración y que emborrachan la tristeza de los derrotados por la vida....no sé. Me vino primero el título y la escribí como un vómito. La melodía estaba allí...esperándome.
    En mi muro podéis escuchar parcialmente en un video esta canción, que canto con mi sobrino Carlos, de hermosa voz.
    Gracias Andrés por todas tus palabras.

    "Una hora dormida"

    Hay una hora dormida
    que se despierta despacio,
    hay una hora pequeña
    que me cabe entre tus brazos.
    Hay una hora escondida
    entre mi boca y tus labios,
    hay una hora pequeña
    que se me escapa despacio.

    Hay una luna escondida
    que se viene un poco abajo,
    cuando te marchas deprisa,
    cuando te mueves despacio.
    Hay una luna escondida
    que se viene un poco abajo,
    cuando te marchas deprisa,
    cuando te mueves despacio.
    Hay una hora en mi cuerpo
    que se demora en tus manos.


    Hay una hora dormida
    que esconde a los solitarios,
    a los poetas sin versos,
    a los tristes y borrachos.
    Hay una hora escondida
    entre mi boca y tus labios,
    que duerme durante el día
    cuando todo ya ha empezado.

    Hay una luna escondida…(tus labios)

    Hay una hora dormida
    que se despierta despacio,
    hay una hora pequeña
    que me cabe entre tus brazos.
    Hay una hora dormida…ū

    ResponderEliminar
  4. Maravilla de sonido Andrés, entiendo tu emoción. Me sentí bien y con ganas de cantar esa hora dormida, que me trae buenos recuerdos y ganas de descubrir exactamente por qué la hice. Hay más cosas en ella que un tiempo estrictamente íntimo: horas dormidas que nos relajan, horas tan dormidas de vida que nos duelen, horas donde se adormila la inspiración y que emborrachan la tristeza de los derrotados por la vida....no sé. Me vino primero el título y la escribí como un vómito. La melodía estaba allí...esperándome.
    En mi muro podéis escuchar parcialmente en un video esta canción, que canto con mi sobrino Carlos, de hermosa voz.
    Gracias Andrés por todas tus palabras.

    "Una hora dormida"

    Hay una hora dormida
    que se despierta despacio,
    hay una hora pequeña
    que me cabe entre tus brazos.
    Hay una hora escondida
    entre mi boca y tus labios,
    hay una hora pequeña
    que se me escapa despacio.

    Hay una luna escondida
    que se viene un poco abajo,
    cuando te marchas deprisa,
    cuando te mueves despacio.
    Hay una luna escondida
    que se viene un poco abajo,
    cuando te marchas deprisa,
    cuando te mueves despacio.
    Hay una hora en mi cuerpo
    que se demora en tus manos.


    Hay una hora dormida
    que esconde a los solitarios,
    a los poetas sin versos,
    a los tristes y borrachos.
    Hay una hora escondida
    entre mi boca y tus labios,
    que duerme durante el día
    cuando todo ya ha empezado.

    Hay una luna escondida…(tus labios)

    Hay una hora dormida
    que se despierta despacio,
    hay una hora pequeña
    que me cabe entre tus brazos.
    Hay una hora dormida…ū

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una vez tomada la medida a tu onda, un verdadero placer. Como siempre profundo el verso y acariciadora la melodia. Gracias.

      Eliminar
  5. Eso palpita aún en mi pecho. Alessandro explotando, Osvaldo plena alma aun vibran. Mainstream, nuevo aliento de poesía. Voz de Luna. Espectáculo digno de aguamiel. Deliciosa sabiduría que ensancha el alma.
    El Sol y la guitarra son los culpables de «Soy un cretino», una canción que necesitaba mi garganta. Es curioso como el cuerpo a veces te habla, cuando tiene hambre, cuando quiere sueño, cuando debe mover aire.
    Me encanta que resulte un pop/reggae, agradezco enormemente que me enseñen lo que hago, pues yo no sé mucho de ritmos y menos de clasificaciones. En mi cabeza se oía un Foxtrot...¿No se escucharon las segundan voces de las dos chicas del coro, el piano, las trompetas, los platillos y el solo final de saxo?

    Soy un cretino.

    Tengo la boca muy seca
    de contarte la misma historia
    a todas horas,
    y es que ya no sé
    qué palabras usar.

    Tú nunca escuchas
    lo que yo te digo,
    parece que estás sorda
    de alma y corazón.
    Pero no, no, no, no,
    yo no voy a parar.

    Te lo he explicado
    de dos mil maneras;
    hice un croquis por la casa entera
    pero tú, tú, tú, tú,
    no quieres escuchar.

    Se lo he contado
    a todos tus amigos
    pero tú no entiendes
    el mensaje que te digo
    pero no, no, no,
    yo no voy a parar.

    Eres muy mala.
    Solo escucha la verdad que yo te digo, olvida las mentiras que he contado,
    era tu culpa.
    Estaba perdido en tu cuerpo, obnubilado.
    Me tenías hechizado.
    Lo acepto pequeña, soy un cretino,
    pero este mezquino,
    no te puede olvidar.

    He cambiado mi vida entera,
    ahora soy otra persona
    ya no soy el que era
    solo quiero que te acerques
    y puedas comprobar.
    He dejado la droga y la bebida.
    Ya no voy de noche
    a la Ciudad Prohibida,
    pero tú, tú, tú, tù,
    no quieres escuchar.

    Sergio Sanz.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cada dia nos descubres algo nuevo. Sigue siendo un placer seguirte.

      Eliminar
  6. Gracias Andrés por tu crónica, tu empeño y tu compromiso. De mi actuación, qué decir. Emocionado por la respuesta a una canción que dudaba en cantar. Los coros no los hubiera alargado dos minutos ni dos horas ni dos años, sino toda mi adolescencia recuperada. Gracias a todos por remozarme así. Quizá el nuevo equipo tuviera algo que ver tambien, jeje. Siendo así, bienvenido sea!

    ResponderEliminar
  7. Como siempre, Andrés, gracias por tu tiempo y el regalo que nos haces cada semana con la crónica.
    Muy inspiradas las letras de Camilo, Fernando, Beatriz y Sergio. ¡Cuánta verdad en ellas! Camilo: allá ellos con su mainstream, jaja, Fernando: al menos es una hora que destaca del plano de la rutina (qué bella letra), Beatriz: la pura vida y la consabida crisis existencial que nos atenaza tarde o temprano, ¡gran poema!, Sergio: la locura contradictoria del enamorado no correspondido, muy inspirado, compañero. Una lástima haberme perdido la catarsis creativa de Alessandro. Puedo atisbar lo que pudo ser...
    Me alegra mucho Andrés que te gustara el recital. Aprendí mucho aquella noche, bella noche que queda registrada en la memoria.
    Abrazos, y hasta ahora.

    Andreas

    ResponderEliminar